Gimnasio

Trabajo en el mismo gimnasio hace más de 4 años. Mi función era asesorar a las personas que asistían al lugar dándoles una dieta y una rutina de ejercicios según lo que ellas quisieran lograr. Más de una vez algunas clientes intentaron tener algo conmigo, notaba la manera en que me miraban, el tono en el que se dirigían a mi y la manera de saludarme, mucho mas cariñosa de lo normal. La respuesta a su pregunta es no, nunca tuve nada con ninguna de ellas. Es verdad que eran mujeres lindas pero mi ética laboral siempre fue más fuerte. Hasta que esa ética fue derribada al conocerla a ella. 
Era un viernes por la tarde casi noche, Había sido un día común pero ya estaba finalizando y no quedaba nadie en el gimnasio, solo esperaba a que sean las diez para cerrar el local y marcharme a casa a descansar. Eran las nueve y media cuando se abrió la puerta y apareció ella. Me encontraba navegando en Internet matando el tiempo, reconozco que al verla la impresión fue impactante. 
-hola, quería empezar el gimnasio. 
-buenas noches, mira a las diez cerramos pero si queres podemos ver que hacer. Definir rutinas y darte una dieta balanceada. Vos que pretendes? 
- Quiero lograr tonificar mi cuerpo y endurecer mi colita. 
Al decir esto dio media vuelta respingando y mostrándome la cola. Segundo impacto. 
-Ok al fondo tenes los vestuarios si queres pasa y cambiarte. 
-Ok, vuelvo en un rato, lindo. 
Me resultaba una mujer verdaderamente hermosa, me sentí atraído de inmediato fue algo químico flotando en el aire. 
Luego de cinco minutos retorno ya con ropa más de acuerdo al gimnasio. Se había puesto unas calzas negras, obviamente ajustadas, y una musculosa roja ceñida al cuerpo. Me llamó la atención la rapidez con la que se cambio tan rápido. 
-Ya estoy lista para lo que quieras lindo. 
-Me llamo Ignacio. 
-Mía, mucho gusto Ignacio, tenes un muy lindo nombre siempre me gusto. 
-Gracias. Que te parece si empezamos haciendo unas abdominales? 
- Si, quiero empezar ya mismo. 
Le dije que realizará diez rutinas de veinticinco abdominales y que en un momento acudiria a ella para ayudarla. Yo me retiré un momento al baño y al volver la encontre haciendo los ejercicios. 
-Y? como va Mía? 
- Creao que bien, pero me gustaria que me agarres los pies , me cuesta solita. 
-ok, no hay problema. 
Al sentarme y tomar sus pies con sus manos prosiguio con las abdominales. Cada vez que subia podia apreciar sus senos gracias a lo escotada de la musculosa. 
Al terminar la serie le di una nueva tarea. 
- Ahora vamos a hacer un ejercicio para endurecer y levantar la cola. 
- Siii, eso es lo que mas quiero. No te parece que tengo que mejorarla? 
De nuevo el mismo gesto, se dio media vuelta acostada en el piso y la levanto solo apenas. Yo comenzaba a pensar que esta chica o era muy inocente o buscaba otra cosa. 
- Si, para mi no lo necesitas, pero me remito a lo que me dijiste al entrar. 
- Ok, Ignacio- Que hago? 
- Ponete en cuatro, por favor. 
- Apa , no sabia que era esa clase de ejercicio, jajajajjaja. 
- perdón , no lo dije con segundas intenciones. 
- todo bien, relajate un poco. Soy así de loca . 
Se coloco en la posicion que le indique y por un segundo me pareció que no traía ropa interior. 
-Ahora intenta levantar la pierna derecha por sobre tu hombro. 
-Así? 
- si perfecto, realiza 25 movimientos y luego cambia de pierna. 
- ok. 
Al comenzar el movimiento, mi sospecha que parecía loca, se confirmó. Con lo ajustada de la calza debería aparecer las marcas de la ropa interior pero no había nada. Solo esa cola voluptuosa y tentadora. Por primera vez empecé a fantasear con una clienta. imaginaba que se ponía de pie y me abanzaba bajando mis pantalones para dejar al descubierto mi miembro, lo tomaba entre sus manos y comenzaba a engullirlo con su boca. 
Su voz me trajo de nuevo a la realidad. 
- Ya esta Ignacio. Y ahora que? 
- Ahora podrías pasar a la cinta de correr, si te parece bien. 
-Si, esta bien. 
Al comenzar a correr veía como sus pechos rebotaban una y otra vez. Me imagine saboreándolos con mi lengua y jugando con mi lengua en sus pezones logrando que se pongan muy duros. Una vez más ella me devolvió a la realidad. 
-Que te pasa? te noto pensativo. 
- Disculpame, estoy un poco cansado ya a esta hora. 
- Me imagino, por suerte ya te vas a tu casa donde te esperara tu novia. 
- No tengo novia. 
- Pero algo deberás tener por ahi, no? 
- No hace un tiempo que estoy solo. 
- no te creo, con todas las clientes que vienen acá algo tenes que tener. 
- no salgo con clientas por respeto a mi trabajo. 
- Guau, sos muy profesional. Pero siempre hay una excepción jejejejeje. 
-No te entiendo. 
-Deja no me hagas caso. 
Ella comenzó a transpirar, lo cual me exito mucho. Despedia un aroma a sexo irresistible, cada vez me costaba mas y mas contener la compostura y no hacer lo que pensaba. Tomarla por detrás y apoyarla contra los espejos para hacerle el amor hasta desfallecer. 
Al finalizar de correr le dije que iba un segundo al baño. Ella me dijo que me esperaba y se encamino hacia los espejos. Pense que era telepata y logro meterse en mis pensamientos. 
Al regresar me quede petrificado ante lo que veia. Se habia colocado frente al espejo y saco sus senos apreciandolos en el reflejo de estos. Parecía no notar que estaba yo. Los tomaba entre sus manos y los juntaba poniendo una cara de seductora que en mi resultaba efectiva. Tosí para haceme notar. Ella giro y me miro sorprendida. 
- Ay, me quiero morir. Me parecio que ibas a tardar y no se.. 
- Esta bien te pido disculpas. 
-Disculpas por que? (Ella miro hacia mi entrepiernas, sonriendo). Me parece que te gusto lo que ves. 
Me di cuento que tenia una erección descomunal, la cual amenazaba con romper mi pantalón. 
- Uy, disculpame. 
- De nuevo pidiendo disculpas. Relajate, me parece que estas muy tenso Ignacio. 
Se acerco a mi y coloco su boca a unos centímetros de la mia. 
-Hace mucho que no estas con una mujer? 
- Estoy pensando a creer que demasiado. 
Giro y apoyo su cola contra mi erecto miembro. 
-Que pensas de mi cola? Como la sentís? 
-Durita y turgente. 
Yo parecía un tomate por la situación. 
-Te gusta no? 
-si, mucho. Me parece preciosa. 
- no queres verla? 
Al decir esto, se bajo un poquito la calza. Y tenia razón, no llevaba ropa interior. 
- Mirala, decime que te parece. No te dan ganas de comerla? 
Al escucharla decir eso exploté. por primera vez en mi vida no pude contenerme. Me agache y comencé a besarle la cola. La recorria con mi lengua, la lamia, hasta que me detuve en su agujerito y comencé a dibujar círculos en ese lugar durante un rato. Luego continué lamiendola, pero mis lamidas empezaban en su vagina y podía sentir la humedad de esta. 
-Tranquilo Ignacio que nos e acaba jajajaja. Estas muy caliente. 
Giro y saco su cola de mi cara. 
- A ver que tenes ahi. 
Metió su mano entre mis ropas y saco mi miembro. 
- uuuyyyy que linda pija que tenes, me muero por conocer su sabor. 
Diciendo esto se la metió en la boca y comenzo a chuparla muy delicadamente 
-Me gusta hacer esto, pasarle la lengüita por la cabeza, ver lo venosa que esta. Me parece que a vos también te gusta no? jeejejeje 
- no pares por favor. 
- Claro que no pienso chuparme toda esta enorme pija, me encanta hacerlo. 
Ella no paraba de meterse mi pene en su boca y yo no podía parar de gemir y de explotar de placer. 
-Estamos haciendo las cosas mal. Ya son mas de las diez, vos tenes que cerrar. Puede venir cualquiera. 
- No quiero que pares Mía por favor. 
-Yo no dije que iba a parar tonto. Vivo a seis cuadras de acá, que te parece si vamos a mi casa y nos hacemos todo lo que tengamos ganas de hacernos? 
- ok, vámonos pero ya! 

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