El sol encandilaba, la bese con pasión antes de despedirnos… esa noche nos la pasamos abrazados y cogiendo tiernamente, me contaba cosas y yo lo mismo la despedí con una pequeña sensación de vacío, la veía ingresar a su casa y ya la extrañaba.
Era lunes, hasta el viernes la tendría así que me imaginaba las cosas que le haría el resto de los días por lo menos 3 noches como mínimo seguro la tendré pensé excitado pero al mismo tiempo con un halo de decepción.
Me desperté a las 18hrs. Había dormido todo el día, mis padres ya no estaban así que no tenía la camioneta, iba a ser un pequeño problema ir a buscarla y llevarla a un telo así que arregle con mi amigos Cristian que me preste la casa, como el laburaba 15 días por 15 de franco, (es técnico en higiene y seguridad, pero más delante contare eso) tenía su casa sola
Quedo en ir a las 3 am. Había arreglado con unas ex compañeras para salir a comer algo y ponerse al día, la ansiedad me invadía no quería parecer pesado pero me moría por mandarle algún msj preguntándole como la estaba pasando, cualquier cosa para saber que hacia…
Me dormí mirando la tele, soñé miles de cosas extrañas hasta que me despertó el timbre del celular, conteste medio dormido y sentí su voz
-¡abrí que voy llegando! Me dijo y corto
-salte de la cama el sueño se había despabilado en ese instante, me lave la cara y Salí presuroso a abrir la puerta, cuando abrí ella estaba allí con una botella de New Age y su carita de nena mala.
-¡Me aburrí y vine antes! Dijo sonriendo, mire la hora y eran la 1am. La bese y entramos
Estaba contenta, mas gata que de costumbre me besaba y me avanzaba, sus manos me tocaban la pija por sobre la bermuda que estaba realmente dura a esas alturas
-¡Me estuvo esperando despierta! Dijo en tono cómplice mientras metía su mano por debajo de la bermuda
Sonreí no me salía nada realmente me inhibía así que seguí besándola
-¡hoy vine bien putita para que me cojas fuerte! Dijo mientras me mordía los labios con fuerza
Abrí mis ojos de par en par, su determinación me sorprendía, solté un grito de dolor por la fuerza en la que me mordió el labio
-¿Que te pasa bebe? ¿Te lastime? Me dijo tiernamente y preocupada
Me sorprendí por la dualidad de su comportamiento
-¡No! ¡No cosita hermosa! Atine a contestar sorprendido
Se volvió a convertir en una gata y me tiro sobre el sillón sus ojos brillaban se notaba que estaba caliente y quería coger, me sorprendía verla así todavía me costaba reaccionar
Tenía un vestido, cortito al cuerpo color negro con unas pequeñas tiras, con hombros descubiertos, sus bucles dorados hacia delante se escurrían entre su escote, me obligo a abrir el vino aunque no tenía ganas de tomar y me hizo que ponga un tema sexy en el equipo (x suerte con mi amigo somos fanas Ac-dc) puse Back in Black y me dijo:
-¡sentarte y disfruta mi primer show!
Tome un largo trago de la botella sorprendido, no conocía esta doble personalidad de Steffy y me senté en el sillón, tomo el control remoto del equipo y luego de que me senté volvió a poner el tema en el equipo, lo que siguió fue magistral, perfecto, sexy, único, maravilloso
No sé como describirlo, solo recuerdo que mientras me devoraba la botellas de New Age por la excitación, y los acordes de Back in Black sonaban, sus manos masajeaban su nuca, su bucles dorados se esparcían por su rostro, las tiras del vestidos resbalaban por sus hombros, pronto de a poco casi con una sensualidad perfecta, poco a poco su hombro descubierto dejaba ver su corpiño, su abdomen… las tiras de su bombachita.
Yo atónito seguía pasmado viendo como tanta belleza se desplegaba enfrente mío, se acerco lentamente bailando sexy, luego… gateando me bajo la bermuda, mi excitación era monstruosa, ¡mi pija estaba durísima! Me miro con su personaje de gata a flor de piel y con la lengua lamio la cabeza de mi pija emulando ser ¡una gatita!
Tratando de no ser un eyaculador precoz, trate de desviar mi excitación… trate de enfriarme pensando cosas desagradable, pero era prácticamente imposible, su cara de nena puta me podía, atine a tomar su pelo y observar la majestuosidad de ese rostro, contemplando lo perfecto de la escena… su espalda arqueada, su pelo rubio desordenado, su bombachita costosa, su piel dorada, eran complementos únicos, realmente amaba a esa mujer que me chupaba la pija…
Pasaron unos minuto y la aleje de mi pija, comencé a besarla apasionadamente, mis manos recorrían sus pechos, su abdomen su concha su cola, todo su cuerpo.
Sentí nuevamente mis deseos oscuros, animales por así decirlo invadirme nuevamente, cuando estos me invadían, no existían la caballerosidad ni la ternura me convertía literalmente en un animal…
la agarre, la di vuelta y comencé a chuparle el culo, soltó unos grititos de placer, la tome con fuerzas de sus manos y las deposite en su espalda mientras mi lengua saboreaba ese agujero chiquitito hermoso que tenia, intente meterle un dedo y soltó un grito de dolor acompañado por una advertencia y un sutil insulto.
-¡Ni se te ocurra hacer eso! ¡No seas hijo de puta!
¡Listo! pensé más que advertencia me pareció una señal de aprobación.
Seguí enfocado en su culo, mi deseo animal iba mutando mi comportamiento, la tome de los pelos y le clave la pija en la concha sin preámbulos, sus gritos se hacían escuchar, tome su cintura pequeñita y con fuerzas empecé a arremeter, su excitación era tal después de unos minutos que no tenía problemas para decirme cosas u insultarme, parecía que le daba placer hacer eso…
Notando como acababa, aproveche y le cole un dedo en el culo, note como se resistía pero lo dejo entrar, pensé ¡esta es mi chance, ese culo debe ser virgen!
Así que lo deje un rato dentro de su cola luego metí un segundo, ya sus gritos de placer no parecían de placer, me miro con cara de odio y dolor pero no me dijo nada
Es ahora o nunca pensé, mientras le di unos tragos de vino
-¡Toma más! Le dije luego de un discreto trago
Mis dedos seguían en su culo, cerró los ojos y tomo un trago realmente largo, casi a fondo blanco, quedo muy poco en la botella, tome lo que quedaba convencido que ella esperaba que le clave la pija en el culo, saque mi pija y la deposite en la entrada de ese agujerito chiquitito, note como sus manos tomaban con fuerza un almohadón y se lo llevaba a su boca, refregué mi pija en su cola esperando alguna objeción, pero nada ese silencio me daba vía libre,
Consentimiento Tácito como decíamos en Derecho, el contacto de mi pija con su ano fue sutil todavía no se la había mandado, se dio vuelta con carita de nena con miedo y me dijo:
-¿que me vas hacer? Estirando su trompita
Esas cosas me volvían loco, mordiéndome los labios y con mis ojos desencajados, sin preámbulos le clave la cabeza de la pija sentí la resistencia de su ano, la fricción de mi pija cuando iba entrando era tremenda, se resistía ese culo, sus gritos no tardaron en llegar con su mano trato de sacarme, pero la sujete con fuerza
-¡respira hondo! ¡Inhala y exhala! Le dije con la mímica de la situación
-¡nooo me duele, sacala por favor! Imploro con sus ojos brillosos
-¡respira hondo y relaja la colita bebe! ¡Ya se va a dilatar y no vas sentir dolor! Insistí con una calentura demoniaca y tratando de mantener la calma.
Verla así toda indefensa y con mi pija destruyendo esa colita chiquitita, esa manzanita bella que tenia de cola me desquiciaba, el morbo por hacerla sufrir me invadía tenía ese toque de masoquismo de vez en cuando
-¡me duele sacala por favor! Imploraba casi llorando
-no hice caso y deje mi cabeza dentro esperando que ese culo se dilate rápido,
-¡respira hondo! Insiste apretando los dientes y comencé a mover la pija despacio con toda la paciencia del mundo
-¡Ahhhhyyyyyyyyy! ¡¡No quiero paraaaaa!! Balbuceaba mientras respiraba hondo y con prisa
Venias gatita, ¿tenias ganas de coger? ahora quien manda, te vas a acordar de mi, pensaba en mi cabeza
-¡Ves ahora se está dilatando! Dije mientras mi pija ingresaba unos centímetros y retrocedían otros cuantos
Sus gritos se ahogaban en la almohadón que tenía en su boca, gritaba cosas que no entendí así pasamos varios minutos, note que estaba toda sudada, realmente estaba sufriendo su piel estaba roja, cada vez que se la metía ella se inclinaba hacia delante para que no ingrese mas o me alejaba con la mano.
En un momento se la saque quería verle el culo roto, dios era hermoso esa visión de su culto cerrándose y su carita que me miraba con dolor, eso me puso aun mas morboso me agarre la pija en el tronco con toda mi fuerza, creció unos cuantos centímetros más su circunferencia las venas parecían que iban a explotar , la cabeza de mi pija estaba gigante, realmente estaba monstruosa y me acerque nuevamente antes que se cierre del todo ese culito y le clave la cabeza, ni torpemente pero mucho menos con delicadeza, sentí la fricción en las paredes de su culo que se resistían a abrir paso dio un grito desgarrador y note como contrajo su cola por el dolor, se dio vuelta apretando sus dientes y con los ojos llenos de lagrimas, libere la sangre contenida en la pija y volvió a su tamaño normal, ella seguía gritando y llorando.
-¡Por favor paraaaaaa! Imploraba entregada al dolor
Me di cuenta que estaba empapado en transpiración, sus gritos volvieron a ahogarse en el almohadón y comencé a cogerla mas rápidamente, de vez en cuando sus gritos retumbaban por toda la casa, no se x cuanto tiempo me la cogí por el culo, la verdad perdí la noción del tiempo, recuerdo que le acabe en el culo, tuve que sacar casi toda mi pija y dejar solo la mitad de la cabeza para acabar, fue increíble ver su cola llena de mi semen, que se chorreaba por entre sus piernas, me tire sobre el sofá exhausto, ella se reincorporo con dificultad me miro con una mirada dócil su rostro lleno de lagrimas, no dijo nada y se fue al baño.
En ese instante me sentí para el orto, “soy un animal” pensé, como voy a a tratarla así, ella era una flor delicada y me la cogí como me cogería a cualquier trolita para pija…
Me quede pensando cómo le pediría disculpas, pensando que seguramente se enojaría y se iría a la mierda…
Salió a los 20 minutos del baño duchada y en toalla, sus ojos seguían rojos, me levante y la abrace.
-¡perdón bebita! Atine a decir con cara de arrepentido
Me miro y no pude traducir esa mirada no sé si fue comprensión o indiferencia
No dijo nada y se fue al cuarto, caminaba con dificultad, me causo gracia en ese instante me dije: “!a la mierda la hice bosta en serio!” y la seguí
Se recostó en la cama y me miro con cara de nena haciendo pucherito
-¡sos cruel! ¡Realmente me hiciste doler mucho, sufrí un montón! ¡No me puedo ni sentar!
-¡Bebe perdóname tenes razón soy un enfermo! Y me acerque y la abrace
-¡malo! ¡Sos malo conmigo! Me dijo con su trompita estirada
Se acurruco en mis brazos, y prendimos la tele, después de un largo rato la recosté con su espalda desnuda hacia arriba y le saque la toalla, la bese tiernamente me fascinaba su espalda.
-¡ni se te ocurra calentarte por qué no vamos hacer nada, me duele todo! Dijo imperativamente
-¿donde te duele? ¿Aquí? Dije mientras besaba sus cachetes suavemente
-¡sii! ¡Me duele la colita! Dijo en tono de nena mimosa
Al instante me puse duro de nuevo, pera la advertencia estaba dada no íbamos hacer nada
Así que pase el resto de la noche mimándola y besándola.
Creo que fue una noche romántica mas allá de la bestial cogida anal que le di…
Ya se viene la 8va parte (la despedida de Steffy)
Gracias por molestarse a leer me demoro a veces en continuar escribiendo por el estudio ya que estoy a punto de recibirme, y cuando escribo me cuesta resumir porque me acuerdo de miles de cosas y detalles
Follando con la mejor amiga de mi novia
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Esto pasó hace dos años. En ese entonces salía con Lorena. Una pendeja muy linda. No tenía un cuerpo de revista. No muchas tetas, pero sí una retaguardia que rajaba la tierra. Desde bien chica se había hecho fanática de los mini shorts, las polleritas y las calzas, lo que despertaba silbidos callejeros y gritos de degenerados de todo tipo.
Por esa época íbamos a la escuela secundaria y teníamos clase de gimnasia en un polideportivo que quedaba lejísimos. Íbamos siempre en un micro que contrataba la misma escuela , pero teníamos que llegar a horario para cuando partía, si no nos las teníamos que arreglar por nuestros propios medios. Nosotros no nos preocupábamos por ir en el micro de la escuela porque uno de nuestro grupo de ya tenía auto y registro de manejar.
Ese día, mi novia, Lorena, había faltado y el chico que manejaba tenía que hacer un trámite para el papá. Yo tenía que ir a clase sí o sí, ya que no me quedaban más faltas. Así que quedamos en banda la mejor amiga de mi novia (Alicia), mi mejor amigo y yo. Nos tuvimos que tomar un colectivo para ir al Poli. Cuando nos subimos no estaba muy lleno, pero en la parada que había en la estación de tren empezó a entrar gente a lo loco. Íbamos apretados como sardinas y a la amiga de mi novia la empezaron a apretar. Era una pendeja muy tímida y linda. Yo le veía la cara de incomodidad y la traje frente a mi, manteniendo un espacio. Mi amigo entendió rápidamente que debía pararse atrás para protegerla. Ella me agradeció y me dijo que le pareció que una mano la había tocado sobre la pollera. Yo le dije que no se preocupara, que nosotros dos la íbamos a cuidar y ella me sonrió. Pero el colectivo seguía subiendo más y más gente, hasta que ya no pudimos mantener la distancia corporal.
Alicia -así se llamaba- quedó pegándome las tetas a la altura de la boca del estómago. El roce me empezó a calentar como loco. Sus pezones se perfilaban como puas a punto de atravesar el corpiño y la remera. En eso lo miro a mi amigo que seguía detrás de ella. Me hacía una mueca que no podía descifrar. Las tetas de Alicia me seguían masajeando el pecho, mi verga estaba como una lanza tratando de atravesar el pantalón de gimnasia. Ella tenía los ojos cerrados y la cabeza levemente inclinada hacia abajo. Mi mejilla estaba al lado de la suya. Busqué la mirada de mi amigo para saber qué me quería decir. Miraba el culo de Alicia, así que vi que ella seguía con los ojos cerrados, me erguí y asomé por sobre su hombro. El tenía su mano debajo de la pollera y le acariciaba el culo, manoseandolo exageradamente, violentamente. Perdí el control y llevé mi mano a su entrepierna, por fuera de la pollera, para tantearla. Ella no hizo nada solo un gemido muy suave muy y ahí mismo me desenfrené, metí mi mano por debajo de la pollera, con el dedo le corri la bombacha y la toqué, estaba totalmente empapada, mi amigo le metía el dedo en el ano y le masajeaba los cachetes, yo le tocaba el clitoris y luego sus labios vaginales y le metía un poco los dedos adentro. Al rato, ella ya habría tenido varios orgasmos cuando el colectivo llegó a una parada en la que se bajaba mucha gente. Con los brazos nos sacó las manos de encima y se corrió a un costado acomodándose la pollera. Ahora miraba por la ventana sin decir nada. Nadie hablaba. Cuando llegamos a la zona del poli los tres nos bajamos. Mi amigo rompió el silencio: vamos a los baños del fondo. Alicia empezó a caminar para allá. Nosotros la seguíamos y nos mirábamos con cara de asombro.
Estábamos solos los tres. Le bajó el pantalón a mi amigo y le comenzó a chupar la verga como una tigresa. Yo mientras le tocaba la concha y las tetas desde atrás. No duró ni dos minutos. Él le largó todo, ella chupó hasta la última gota y escupió prolijamente en uno de los lavabos. Él se echó a un costado, en el piso, exhausto, maravillado. Me tocaba a mí. Le empecé a chupar el cuello desde atrás. Ella todavía se agarraba del lavabo. Me bajé mi pantalón y su bombacha, sin sacarle la pollerita, tenía la verga dura como la roca, se la metí en la entrada de la vagina, ella en cuatro sostenida de la pileta y me dijo “no”, “soy virgen”, por ahí no, entonces le comencé a masajear la entrada del ano con los dedos. “Me tenés que chupar” me dijo. Me arrodillé y comencé a lamer su ano, mezclándolo con sus fluidos vaginales que salían de a chorros, le metía la lengua bien adentro de su apretado ano y después los dedos, me puse saliva en la verga y comencé a penetrar. Me duele mucho, me duele , agarré jabón líquido y me embadurné la pija y volví a embestirla.
Entró perfecto. “Me duele” me dijo, la mandé más adentro y comenzó a gemir , yo le tocaba el cĺitoris, gemía como loca y le largué todo, después de sólo algunas bombeadas. A todo esto mi amigo ya se había recuperado y quería más. “Dejame a mí” me dijo. Yo sacaba agotado mi pija enjabonada de su culo. ella seguía abrazada al lavabo. Mi amigo se la colocó en la entrada de la vagina. Ella dijo “por ahí no”, “soy virgen” y él dijo “te va a encantar”. Ella dijo “no” y trató de zafarse, pero el era muy fuerte y la agarró bien fuerte de los brazos. Ella decía “no no no soltame”, pero él ya tenía su verga adentro y le estaba bombeando hasta el himen, ella seguía “no no no no”, los no se fueron convirtiendo en gritos de placer, ella seguía “no no no”, pero con placer como si fueran gemidos, hasta que cedió el himen y corrió sangre por su pierna, poca, y ella seguía “no no no no” y el bombeaba y bombeaba, sin acabar la sacó y se puso jabón en la verga y a penetrarle el ano. Ya no estaban forcejeando, hace rato. Ella totalmente entregada. Le empezó a bombear el orto y después de pocos minutos le acabó adentro. Mi verga ya estaba tiesa de vuelta. Me limpié el jabón con agua y se la acerque a su cara. Le dije que me la chupara y empezó a lamer como loca. Quiero que me mires a los ojos le dije, y ella me miró y yo le corrí los pelos de la cara y la miré cómo me chupaba la verga como si no existiera otra cosa en el mundo, y después de un rato le dije: “Quiero que te tragues todo”. Y le repeti mirándola a los ojos, teniéndola de los pelos, “tragate todo” y largué todo, y ella mirándome a los ojos se fue tragando cada uno de los chorros hasta que no quedó nada. Los tres estábamos muertos. Pero nos arreglamos un poco y salimos.
Ya era muy tarde para ir a la clase de gimnasia así que nos volvimos. Cada uno en su colectivo. Llegué a la casa de mi novia. Para darle una sorpresa, sin tocar timbre me metí por la puerta del fondo que daba a la pileta. Ella estaba en la pileta, pero no estaba sola.
Por esa época íbamos a la escuela secundaria y teníamos clase de gimnasia en un polideportivo que quedaba lejísimos. Íbamos siempre en un micro que contrataba la misma escuela , pero teníamos que llegar a horario para cuando partía, si no nos las teníamos que arreglar por nuestros propios medios. Nosotros no nos preocupábamos por ir en el micro de la escuela porque uno de nuestro grupo de ya tenía auto y registro de manejar.
Ese día, mi novia, Lorena, había faltado y el chico que manejaba tenía que hacer un trámite para el papá. Yo tenía que ir a clase sí o sí, ya que no me quedaban más faltas. Así que quedamos en banda la mejor amiga de mi novia (Alicia), mi mejor amigo y yo. Nos tuvimos que tomar un colectivo para ir al Poli. Cuando nos subimos no estaba muy lleno, pero en la parada que había en la estación de tren empezó a entrar gente a lo loco. Íbamos apretados como sardinas y a la amiga de mi novia la empezaron a apretar. Era una pendeja muy tímida y linda. Yo le veía la cara de incomodidad y la traje frente a mi, manteniendo un espacio. Mi amigo entendió rápidamente que debía pararse atrás para protegerla. Ella me agradeció y me dijo que le pareció que una mano la había tocado sobre la pollera. Yo le dije que no se preocupara, que nosotros dos la íbamos a cuidar y ella me sonrió. Pero el colectivo seguía subiendo más y más gente, hasta que ya no pudimos mantener la distancia corporal.
Alicia -así se llamaba- quedó pegándome las tetas a la altura de la boca del estómago. El roce me empezó a calentar como loco. Sus pezones se perfilaban como puas a punto de atravesar el corpiño y la remera. En eso lo miro a mi amigo que seguía detrás de ella. Me hacía una mueca que no podía descifrar. Las tetas de Alicia me seguían masajeando el pecho, mi verga estaba como una lanza tratando de atravesar el pantalón de gimnasia. Ella tenía los ojos cerrados y la cabeza levemente inclinada hacia abajo. Mi mejilla estaba al lado de la suya. Busqué la mirada de mi amigo para saber qué me quería decir. Miraba el culo de Alicia, así que vi que ella seguía con los ojos cerrados, me erguí y asomé por sobre su hombro. El tenía su mano debajo de la pollera y le acariciaba el culo, manoseandolo exageradamente, violentamente. Perdí el control y llevé mi mano a su entrepierna, por fuera de la pollera, para tantearla. Ella no hizo nada solo un gemido muy suave muy y ahí mismo me desenfrené, metí mi mano por debajo de la pollera, con el dedo le corri la bombacha y la toqué, estaba totalmente empapada, mi amigo le metía el dedo en el ano y le masajeaba los cachetes, yo le tocaba el clitoris y luego sus labios vaginales y le metía un poco los dedos adentro. Al rato, ella ya habría tenido varios orgasmos cuando el colectivo llegó a una parada en la que se bajaba mucha gente. Con los brazos nos sacó las manos de encima y se corrió a un costado acomodándose la pollera. Ahora miraba por la ventana sin decir nada. Nadie hablaba. Cuando llegamos a la zona del poli los tres nos bajamos. Mi amigo rompió el silencio: vamos a los baños del fondo. Alicia empezó a caminar para allá. Nosotros la seguíamos y nos mirábamos con cara de asombro.
Estábamos solos los tres. Le bajó el pantalón a mi amigo y le comenzó a chupar la verga como una tigresa. Yo mientras le tocaba la concha y las tetas desde atrás. No duró ni dos minutos. Él le largó todo, ella chupó hasta la última gota y escupió prolijamente en uno de los lavabos. Él se echó a un costado, en el piso, exhausto, maravillado. Me tocaba a mí. Le empecé a chupar el cuello desde atrás. Ella todavía se agarraba del lavabo. Me bajé mi pantalón y su bombacha, sin sacarle la pollerita, tenía la verga dura como la roca, se la metí en la entrada de la vagina, ella en cuatro sostenida de la pileta y me dijo “no”, “soy virgen”, por ahí no, entonces le comencé a masajear la entrada del ano con los dedos. “Me tenés que chupar” me dijo. Me arrodillé y comencé a lamer su ano, mezclándolo con sus fluidos vaginales que salían de a chorros, le metía la lengua bien adentro de su apretado ano y después los dedos, me puse saliva en la verga y comencé a penetrar. Me duele mucho, me duele , agarré jabón líquido y me embadurné la pija y volví a embestirla.
Entró perfecto. “Me duele” me dijo, la mandé más adentro y comenzó a gemir , yo le tocaba el cĺitoris, gemía como loca y le largué todo, después de sólo algunas bombeadas. A todo esto mi amigo ya se había recuperado y quería más. “Dejame a mí” me dijo. Yo sacaba agotado mi pija enjabonada de su culo. ella seguía abrazada al lavabo. Mi amigo se la colocó en la entrada de la vagina. Ella dijo “por ahí no”, “soy virgen” y él dijo “te va a encantar”. Ella dijo “no” y trató de zafarse, pero el era muy fuerte y la agarró bien fuerte de los brazos. Ella decía “no no no soltame”, pero él ya tenía su verga adentro y le estaba bombeando hasta el himen, ella seguía “no no no no”, los no se fueron convirtiendo en gritos de placer, ella seguía “no no no”, pero con placer como si fueran gemidos, hasta que cedió el himen y corrió sangre por su pierna, poca, y ella seguía “no no no no” y el bombeaba y bombeaba, sin acabar la sacó y se puso jabón en la verga y a penetrarle el ano. Ya no estaban forcejeando, hace rato. Ella totalmente entregada. Le empezó a bombear el orto y después de pocos minutos le acabó adentro. Mi verga ya estaba tiesa de vuelta. Me limpié el jabón con agua y se la acerque a su cara. Le dije que me la chupara y empezó a lamer como loca. Quiero que me mires a los ojos le dije, y ella me miró y yo le corrí los pelos de la cara y la miré cómo me chupaba la verga como si no existiera otra cosa en el mundo, y después de un rato le dije: “Quiero que te tragues todo”. Y le repeti mirándola a los ojos, teniéndola de los pelos, “tragate todo” y largué todo, y ella mirándome a los ojos se fue tragando cada uno de los chorros hasta que no quedó nada. Los tres estábamos muertos. Pero nos arreglamos un poco y salimos.
Ya era muy tarde para ir a la clase de gimnasia así que nos volvimos. Cada uno en su colectivo. Llegué a la casa de mi novia. Para darle una sorpresa, sin tocar timbre me metí por la puerta del fondo que daba a la pileta. Ella estaba en la pileta, pero no estaba sola.
Bebota 8
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Después de la cojidita con Caro, Romi y yo lo volvimos a hacer esa noche dos veces más. La pendeja estaba recopada con que a mi se me paraba en 2 segundos y tenía ganas de seguir sacándole orgasmos.
“Me quedé recaliente y con ganas de más fiestita”, le confesé al final. “¿Tenía ganas de coger con ella?”, preguntó Romi. Como me pareció que era más de curiosidad que de celos, le dije que me había calentado que ella nos mirara coger y que me hubiese gustado lo mismo pero al revés.
Sabía que la pendeja se había soltado un montón, por eso no me sorprendió escucharle decir que a ella le hubiese gustado que Caro se quedara un rato más. “Creo que no me hubiese dado celo que te la cogieras”, me dijo. Lo que siguió fue yo tirando preguntas para ver hasta donde daba la cosa, hasta que me di cuenta que era al pedo. En la cancha se ven los pingos (y yo estaba seguro que una vez en el baile, la pendeja se prendía en todo).
Conclusión: al día siguiente la llamé a Caro, le di las gracias. Pero ella me dijo que no hacía falta porque lo había pasado de puta madre, y le quemé un cachito la cabeza con que había que repetirlo e ir por todo. “¿Qué es todo?”, preguntó Caro. “Que la pendeja te coma a vos, y que se banque sin problemas que te rompa el culito delante de ella”, contesté.
“Hijo de puta, me voy ya a hacer la paja pensando en eso!”, me contestó Caro. Le dije que en la semana lo hacíamos. Quedamos para el viernes, porque era el día que Romi la careteaba en su casa con que salía con las amigas, y en realidad se quedaba a dormir en la mía (la vieja estaba avivada pero se hacía la boluda).
Yo me fui del laburo volando a casa para ordenar todo, comprar algo para picar y bebidas, y recibir a Caro que se vino más temprano. “Te la quiero chupar un ratito yo sola”, me dijo. La dejé, obvio. “Te gusta como te como la pija?”, me preguntaba ella mientras yo pensaba en lo que se venía.
Tenía toda la pija ensalivada, me chorreaba hasta los huevos y la muy puta me masajeaba las bolas. “Me encanta que sos reputa, tan puta que ahora cuando llegue mi novia le vas a comer el culito adelante mío”. Esa frase la puso a mil y siguió chupando para hacerme acabar. Pero yo me contuve bien.
La nena llegó a los 10 minutos. La muy perrita estaba con uniforme. Se ve que lo había hecho no sólo para calentarme a mi, si no también a la “lesbi” de Caro. O para dejar en claro cual era la nena y aprovecharse de eso.
Y dio resultado porque apenas entramos a casa después de haber venido conmigo a los besos en el ascensor, a Caro se le iluminaron lo ojos. Se fue hasta Romi y le dio un piquito mientras la agarraba por la cintura. A Ro esto se ve que la tomó por sorpresa, porque se quedó medio dura.
“Sos hermosa Ro, pensé en vos toda la semana”, le dijo Caro y la pendeja se puso toda colorada. Sin dejarla pensar, Caro le comió la boca y la nena respondió al beso abriendo los labios y dejando entrar en su boquita la lengua de Caro que a los segundos se enroscó con la suya.
Yo estaba ya como loco y con la pija paradísima. No sabía si ir corriendo a buscar la cámara de fotos. Pero no quería perderme un segundo. Ví como las manos de Caro le agarraban el culo a Romi metiéndose por debajo de la pollera tableada y le apretaban las nalgas, mientras seguían transando.
Cuando se separaron para respirar Caro le preguntó: “con esa tanguita fuiste al cole?”. “Si”, contestó Romi tímida, desbordada por el encare de Caro. “A ver, mostrámela”, dijo la otra. Romi se dio vuelta y se levantó un toque la pollerita tableada. “Maxi ya la conoce”, dijo Ro. “Pero yo no, a ver dejame ver”, contestó Caro que se arrodilló a la altura del culito de la pendeja mientras me tiró una mirada cómplice.
-Uiaa! Que linda!!
-Te gusta?
-Si nenita…, pero tu colita se la está comiendo toda!
Ro y yo largamos una risa mientras Caro actuaba bien putita y nos hacía el show.
-Te la voy a sacar de adentro, si?
-….
-Así, así… (decía Caro que le abría la cola con una mano y corría la tanguita con la otra). Mmm! Qué lindo culito que tenes!,- y para ver más el ojete chiquitito había corrido la tanga un poco más para el costado.
-Qué guacho Max, no puede ser…mirá lo que te vas a comer!,- me dijo después mirándome. Yo no contesté, estaba hipnotizado.
-Le vas a dar por el culito?
-Vos qué creés?, le contesté
-Querés que Maxi te rompa el culito?, le preguntó a Romi.
-Si
-Entonces abrilo bien…que te lo chupo todo…, dijo sacándo la lengua y le entró a chupar el orto a Ro.
-Mirá que lindo ojete que tiene! (me decía) Mira cómo se abre! Lo estoy abriendo para vos.
-Te gusta?,- le dije.
-Siii!!!
-A vos mi amor, te gusta como te come la colita mi amiguita?
-Si me encanta, ahora es mi también es mi amiguita,- me contestó jodiéndo.
-Ayyy…son 2 putitas…cómo me hacen calentar putas!!!
-Ahhh!!!,- largó Ro mientras Caro le cogía el culito con la lengua y le metía un dedo en la concha.
“Mmmmm!”, emitía Caro. Después me miró y me dijo que le alcanzara la cartera. Mientras yo fui a agarrarla del sillón donde la había dejado le pidió a Ro que se pusiera en cuatro en el sillón y siguió comiéndole el culo. Alternó con la rajita de la concha que estaba mojada, y se mojó un poco más.
Cuando le acerqué la cartera la abrió y sacó un chiche. “Hoy vine preparada”, me dijo. “La vez pasada extrañé a mi amante a pilas”, se rió. Pensé que se lo iba a meter en la concha pero lo chupó y se lo puso en la argollita a Ro que miraba por sobre el hombro.
Al toque volvió a meterle la lengua en el culo, y eso fue lo que terminó por calentar a Ro que largó un “AAAAAAhhhhhh” mientras Caro la seguía cogiendo con el consolador que traía en su cartera.
-Viste papi como me cojo a tu nenita?,- me dijo Caro mientras Ro empezaba a mover el culo en señal de que le gustaba.
-Te gusta putita?, le preguntó a Romi.
-Ahh…siii… sí me encanta
-Tocáte un poquito la conchita mientras te como la colita…
- Ahh, ahh, ahh, siii, siii, qué lindo…,- decía Ro.
-Qué puta que sos, sos re pajera, no?,- le preguntaba Caro. -Sí soy repajera!
-Te gusta bebé? Te gusta tocarte?
-…. (Ro estaba concentrada en la paja que se estaba haciendo).
-Contéstame putita!!
–Sí, me encanta tocarme…, y me encanta lo que me hacés...
-Así te gusta? Siiiií, tocáte la conchita con más ganas bebe…así…así…mmm…
Cuando Ro parecía que estaba apunto de acabar Caro le sacó el vibro de la concha y le pegó terrible chupada de argolla mojándose ella toda la cara con el flujo de la pendeja y su propia saliva. Romi estaba como loca. “Quiero ver cómo te haces la paja. Metéte los deditos putita”, le dijo Caro, y Ro obedeció. Caro le chupó otra vez el orto. Yo mientras, ya estaba en pelotas y haciéndome la paja viendo el espectáculo.
Cuando no pude más de eso las agarré a las dos y les dije de ir para el cuarto. Abrí la cama desarmándola por completo, y las acosté a las dos juntitas boca arriba y me las transé alternadamente. Le chupaba las tetas a una, luego besaba a la otra. Al final Caro se prendió a las tetas de Romi mientras yo la besaba. Y cuando yo paré de transarla a la pendeja, se la comió ella.
“Qué tenés ganas de que te hagamos?”, me preguntó Ro. “Quiero ver cómo se tocan mirándome la pija”. Ro rezongó. Tenía ganas de que se la metiera. “Mirá la pija que te vas a comer en un rato y pajeate”. Las dos juntitas se entraron a frotar el clítoris. Caro con las piernas abiertas. Ro más juntitas. Le pedí que las abriera. Las dos tenían la argolla brillante por los juguitos.
“Ahora quiero que Caro te chupe los deditos mojaditos que tenés y vos le chupás los deditos a ella”, le pedí a Ro. Caro le agarró la mano a la pendeja que dudaba y se metió los deditos en la boca chupándolos como si fueran una pija. Después le acercó los dedos de ella (el índice y el mayor, que se los había metido bien en la concha), y la pendeja los chupó, primero despacito y con vergüenza. Y después con más ganas.
“Uyyy como me calentó eso!!!”, dije yo mientras a Ro se le dibujaba una sonrisa. Me acerqué y la besé. Después me incorporé y mirándola a Caro le dije: “Dale abrite bien de piernas que tu nueva amiguita te va a meter la lengüita en esa conchita hermosa que tenés…”. Ro me miró. “Quiero que le chupes la concha a tu amiguita…(Ro dudaba), dale mi vida…”. “Vos querés?”, le preguntó a Caro. “Si, mal”, contestó. “Dale mi amor, dame el gusto…”, insistí. Ro ya se estaba acomodando. “Asii mi amor, coméle la conchita”.
Tímidamente sacó la lengua y la pasó por la rajita húmeda de Caro que gimió. Ro empezó a ir y venir por la conchita, pero sin hundirle mucho la lengüita. Le daba besitos por el costado. Caro se abrió más de piernas flexionando un poco las rodillas y se abrió la cajeta como diciéndo “vení pendeja, a comerlaaaa”. La nena le dio el gusto con un langüetazo largo desde el agujerito hasta el clítoris.
Yo no aguanté más, me le fui de atrás a Ro que estaba arrodillada en cuatro y le acomodé la pija en la concha a la pendeja que paró el culo para que le entrara toda. Tenía la argolla recaliente y mojada. Me la entré a coger con toda la pija adentro, sacando sólo unos centímetros y rebotando contra su culo mientras ella iba poniéndole más onda a la chupada de concha.
-Siiiii, qué lengua suvecita, me encanta que me coman la conchita, ahh, si Romi seguí. Que putita…meteme un dedito en la cola, ahiií…,- entró a largar Caro que se puso terriblemente caliente.
-Siiii, Chúpame la conchita y la colita mi amor. Qué bien lo haces! Méteme un dedito en la colitaaaa….,- volvió a pedir, pero Ro se ve que no se animaba a meterle el dedo en el orto a Caro.
-Chúpame pendeja!! Hazme gozarrrrr!!! Dame másssssss!! Dame más lengua, más lengua!!
-Dale mi amor, coméle toda la concha a esa puta de mierda! Dale que la vas a hacer acabar a los gritos!
-Cógeme con tu lengua, seguiiiiiiiii asiiiiiiiiiiiii, más, más, másssssssssssssss!!,- gritaba Caro sin poder controlarse. La cantidad de flujo que largaba su argolla era tremendo.
-Ahora cogéme el culito con esa lengua preciosa!!!,- pidió Caro otra vez. Ro le dio finalmente el gusto.
-Aaaahhhhhhh!!! Seeee!!!! Ayyy qué lindo…. qué lindooo!
-Te gusta, amiguita?-, preguntó Ro que ya estaba recaliente también (tenía la concha abierta y mojada, y estaba casi seguro de que le había robado un polvito mientras se la chupaba a Caro).
-Me encanta!! contestó Caro.
-En serio te gusta cómo te lo hago?
-Si mucho, pero muero porque me metas dos dedos por la colaaaa….
Ro le dio el gustito y después le entró a comer la concha. Caro le acabó a lo loca. Mientras la pendeja acabó otra vez con mi pija en la concha. “Estoy re caliente!!!”, dijo Caro. “Y tengo muchas ganas de ver otra vez como Maxi te rompe el culo!”, agregó.
“Yo quiero ver como te rompen el culo a vos también!! Querés?”, le contestó Ro con los dedos dentro de su ojete. “Sí, sí! Quiero que me tu novio me rompa el culo!”, contestó. Yo no lo podía creer. Había creado dos monstruos. “Vení mi amor cojétela por el culo”, me dijo.
Yo se la saqué de la concha a la nena que me hizo lugar entre las piernas de Caro. La abrí bien, agarré la pija, la ensalivé, y le acomodé la cabeza en el orto. Y se la dejé ir despacito pero sin aflojar hasta que le entró toda. La guacha gritó y se revolvió de dolor y placer. Yo estaba sacado. Había aguantado un montón viéndolas a las dos tortear (y me había gustado, claro).
Había llegado el momento de coger a lo bestia, y estaba particularmente caliente con Caro por cómo la había llevado a Romi a comerle la conchita y cogerle el culito con los dedos (una fantasía que teníamos los dos). Quería darle con todo, y que no se pudiera sentar por una semana.
Ro miraba embobada cómo gozaba su nueva amiga.
-Ayyy, que buena pija
-Te gusta trolita?, le pregunté
-Síiii, pero me duele un poco…
-Ahhh te duele puta? Ahora te va a doler más!
-Ayyy que hijo de puta que sos!
-Te voy a partir en 4 putita…
-Sí partíme..
- Te voy a mandar para Miami con la cola abierta como una cacerola!
-Si dalee
De un sáquele enterré toda mi verga en el culo divino ese
-Ayyyy dale hijo de puta
-Te gusta?
-Dame, dame más fuerte…
Empecé a darle con todo, le bombeaba ese ojete a una velocidad descomunal.
-Ayyy dios! Así hijo de remil putas!
-Te gusta como te cojo el orto?
-Si hijo de puta, tenés una pija bárbara!
-Dale las gracias a Romi que te la presta, ésta pija es de ella…,- dije para que no se pusiera celosa.
-Gracias Ro, gracias amigaaa!! Ahhh.. aahhhhh… ahhhhhhhhhh!!!
-Querés ver cómo la hago gritar?,- le dije a Ro.
-Si, hacéla gritar, que grite mucho como grito yo cuando me hacés la cola!,- intervino Ro para ponerme loco.
Le entré a descocer el culo a pijazos s Caro que estaba con las patas flexionadas cerca del pecho para que mi pija le entrara toda en el orto.
-Asiiiií! Fuerte, fuerte!,- largó Caro complacida.
-Toma puta!!!! Toda en el orto!!! Toda en el orto!!!
-Ah, ah, aaaahhhh. Ay animal me matas, me estás reventando. Qué calentura que tengo! Qué bueno es!
-Te gusta hija de puta? Te gusta como te estoy rompiendo el orto de puta que tenés?
-Siiiii me encanta, dame mássss!!!!
Le seguí dando, un par de minutos más y cuando no aguanté más le saqué la pija del culo. “Date vuelta que viene lo que vos querés”.
-No, no me dejes así, llename de leche!!
-Ssssss, calláte bebé. Vení, vení que te vas a tomar toda mi lechita con esa boquita de puta que tenes!!
Se acercó. “Abrí la boca que si no te voy a bañar de leche!!”, le dije. Abrió la boca y se la metí. Morbazo absoluto al saber que se la había sacado recién de culo. La puta se la comió hasta dejarla limpia y mojada.
Entonces me pajié rápido, le pedí que abriera la boca y le tiré tres o cuatro chorros le lechita caliente. La puta se la tragó y me peteó un rato más hasta dejarme seco. Después la buscó a Ro que estaba con una mano en la concha tocándose. Y le metió la lengua mientras la besaba.
La pendeja se había quedado recaliente y no dejaba de tocarse. Y a mi la pija se me empezó a poner morcillota de nuevo. Caro se avivó y le pidió que se acostara en la cama con las piernas abiertas. “Mostráme como te pajeas pendeja que nos ponés a los dos al palo”, le dijo. Y Ro se entró a tocar la argolla bien abierta.
Caro le besó la pancita y después bajó chupando cada centímetro de piel hasta llegar a la entrepierna. Le chupó la cara interna de los muslos, y siguió bajando hasta los pies. Se metió los dedos del pie en la boca mientras la miraba a Ro a los ojos. Después hizo el camino inverso con su boca a lo largo de las piernas y llego a la conchita.
Con sus manos le abrió otra vez las piernas a Romi y comenzó a acariciarle toda la argolla con la mano abierta, hasta que le coló un dedito en la conchita. “Estas muy caliente bebé!”. Entonces se acomodó y le entró a comer la almejita divina mientras yo me sobaba la pija que ya estaba a media asta. Pero lista para entrar cuando me lo pidieran
-Dios mío!!! Que hermosa sos!!! Que conchita más linda tenés amiguita!!! Te gusta como te hago?
-Si mucho
-Bueno, entonces me voy a comer todo esto!! Te voy a pegar la chupada de concha de tu vida pendeja!!
-Ah, ah, ah, ahh, aaaaaahhhhh!!,- fue largando Romi hasta acabarle en la boca a Caro.
-Uyyy amiguita me acabaste toda en la boca!
-Si me encantó!!!
-Ya veo….., te chorrea hasta el culo! Miraaá!!! Miraaá!!! Mirá como te entra de fácil el dedito!!! Que rico!!!
-Ayyyyy,- largó Ro
-Siiii, abríle el culito que mi pija ya está lista!,- intervine yo.
-Dale vení Max, rómpele el culito,- dijo Caro agarrándome la pija y guiándola al hambriento ojetito de Romina.
-Cógeme el culito papi que está bien calentito!!!!.
-Tomála mi amor, ahí va toda para adentro!!!
-Ayyyyyyyyy siiiiiiii ahhhhhhhh!!!!!!,- gritó Romi mientras la mitad de mi pija se le enterraba en el orto.
-Siiiiiiiii puta siiiiiiii
-Ahhjjjjjjj…. aaaaaaahyyyyyyyy…. aaaaaaaayyyyyyyyyyyy
-Si papi que la sienta!!!! Cojete esa pija puta!!!,- le decía Caro amasándole las tetas. Yo me había quedado quieto esperando que la pendeja que aflojara.
-Dale papito, rompéselo todo que a ella le gusta!!,- insistió Caro otra vez.
-Cogéme mi amor!!!,- me pidió Romi.
-Ayy pendeja, cómo te gusta la verga!!,- dije yo y le enterré lo que había quedado de pija fuera del culo.
-Ahhhhhhhhh…..aaahhhhh…, largaba Romi
-Un poquito más y te la comes toda!!!!,- la alenté yo, y empuje lo que faltaba por meter, hasta que los huevos chocaron con su culo.
-Siiiiiii…Siiiiiii…entró!!!! Me la comí tooooodaaa!!
La llené de besos, estaba enamoradísimo de la pendeja en ese momento. Cuando me di cuenta, quise emparejar las cosas y la busqué a Caro para ver que hacía. La muy puta se chupaba un dedo y se lubricaba el ojete. “Mirá mi amor, mirá como se calentó tu amiguita con nuestra cojida”.Caro se metía sus dedos en el culo mientras yo seguía trabajando en el agujerito de Romi.
-Déjame ponerme en cuatro así me la como toda…. ahhhh…ahhh…,- me pidió Ro al rato.
-Dale, así Carito también puede ver cómo te rompo esa colita hermosa…
-….(Romi se rió)
-Eso querías no?
-Las dos cosas….(más risas).
-Vení puta abrile el culo a mi novia así ves cómo se come toda mi chota por el orto
-Siiii abrime la cola amiga!, pidió Ro.
-Uyy como tenés esa colita! No te arde?,- preguntó la puta de Caro con obvias intenciones, que Romi no entendió.
-Siii un poco me arde, me hace falta le lechita para lubricarlo,- dijo para mi sorpresa.
Le pedí a Caro que le chupara el culo a Romi y fui corriendo a la heladera, y traje un cartón de leche que estaba abierto. Y manotié el chiche de Caro que había quedado en el living. “Tomá, abrile un poquito el culo con esto así le riego después la colita con leche”, le dije a Caro cuando volví al cuarto.
La trola le chupó el culo a mi novia y le metió despacito al chiche mientras le pajeaba el clítoris con la otra mano. “Uyyy bebé, te estoy culiando!”. “Si, me hacés la colaaaa!”, contestó Ro. “Que par de putitas que son!”, dije yo que no lo podía creer. “No te enojes mi amor, a tu pija no le gana nadie”, me dijo Romi. “Querés la lechita por el culo bebé?”, le dije. “Si, mojámelo y después cojeme la cola que quiero acabar otra vez”.
Caro le sacó el chiche del culo y le separó bien los cachetes para que el hoyito quedara abierto. Yo despacito y tratando de no manchar todo, le fui tirando un chorrito de leche en el culo. Parte se coló y parte chorreó a las sábanas, pero no me importó nada. Otra vez le metí el consolador en el culo y se lo saqué. Y otra vez le tiré leche. Esta vez entró casi toda.
Entonces fui por la vaselina de la mesita de luz y me unté la pija. Me le acomodé atrás y ante la mirada expectante de Caro le fui metiendo la pija en el orto a Ro otra vez.
-Ahhhhh….. siii…aahhhhhh…,- decía Ro
-Te gusta putita como te da papi por el culo?,- pregunté, mientras mi cabezota llegaba hasta el fondo.
- Mmmm…ahhh…. Me…me…volves loca papi!!!! ahhhh…ahhhh…
-Sentís la lechita en culo….
-Siii la siento
-Ayy no puedo más!!!, dijo Caro. La vi y estaba metiéndose el vibro por el orto.
-Vení puta ponéte en cuatro al lado de ella que me las cojo un rato a cada una…
Mientras Caro se acomodaba le di con ganas a Romi para que gritara un rato. Después me le fui de atrás a la otra y sin ningún trabajito más que ponerle un poco de vaselina se la enterré toda. “Te la tragaste toda por el culo putita… jaaaaa….”, me reí mientras ella me puteaba y gritaba de placer.
-Que buen culo tenes puta! Estás apretadita todavía! Pero te lo voy a dejar bien abierto! Mirá putá, mirá como te rompo el orto! (casi se me escapa decirle, “como se lo rompí también a tu hermana”. Por suerte me contuve).
-Si! Me estás matando hijo de puta! Dame más despacio!
-Despacio las bolas! A las putas como vos y como mi bebé les gusta sentir la pija hasta el fondo! No putita?,- le dije a Romi que se había puesto de rodillas para mirar de cerca.
-Si papi, dásela hasta el fondo!,- contestó. Le di un beso de lengua recontra calentón mientras seguía el mete y saca.
-Ponéte en cuatro putita que te toca de nuevo!
Romi obedeció y se puso otra vez en cuatro en la cama al lado de Caro. “Abrite el culito con las dos manos bebé”. Lo hizo. “Uyy mirá lo que es esto!!! Vení trola mirá este culito!!!”, le dije a Caro después de sacársela. “Es hermoso Max, que ganas de tener un pija para cojérmela también!”, contestó la guacha mirándole el culo y besándolo. “Acá tenés una pija, vení cométela!”, le dije acercándole mi chota (medio manchadita). La miró y se la comió toda. Que puta por dios!!!!!
Pero no la quería hacer esperar a Romi así que le apliqué un cachito de vaselina otra vez y se la dejé ir. Del dolor se dejó caer en la cama. La besé en el cuello y después me la entré a coger. Caro se acostó al lado, y la acariciaba y le daba besos. Al rato Romi entró otra vez en el juego y la besó. Entonces, y sin sacársela, la puse onda cucharita y me la seguí cojiendo, mientras Caro, que entendió rapidísimo, bajó a comerle la concha.
-Mmmm pero que putita que sos…mirá como te estás mojando,- dijo Caro tras unos langüetazos.
-Te gusta mi amor lo que te hace Carito?,- le pregunté.
-Siii mi amor, me encanta esto,- dijo Romi.
-Nunca me cogí una nenita como vos…y me gusta que seas bien putita…, te quiero mucho bebé,- le dije yo.
-Y a mi no me querés nada?,- preguntó Caro.
-A vos también te quiero… para coger…
-Yo también te quiero para coger…
-Dale puta, callate y seguí chupándole la conchita así acaba todo a los gritos.
-Sí háganme acabar que no puedo más!
-Abrila bien…que la chupo toda…,- dijo Caro y se zambulló de una a comerle la empanada.
Romi gozaba y acabó, pero los tres seguimos como veníamos. Cuando se cansó de chupar, Caro le metió dos dedos por la concha a Romi. “Mirate como estás…te estoy cogiendo con los deditos y te encanta… gritás como una putita… te gusta putita?”. “Si soy bien putita…y quiero que me cojan a full…”, contestó Ro.
Yo le aceleré la bombeada de culo. “Dale puta, acabame otra vez con la pija en el culo, dale, puta, dale.”. “Si cojéme mi amor, soy tu putita, hacéme acabar otra vez con esa pija grandota”. “Tomá puta, tomá, mirá como te rompo el orto”. “Rompémelo todo, es tuyo mi culo, todo soy tuyaaa!!!!!”, contestaba Ro al borde de otro orgasmo descomunal.
“No puede ser…cómo acabas bebé, mirá la nena que te estás comiendo guacho”, me decía Carito. “Pedíle a tu amiguita que te chupe otra vez la concha y mojale toda la cara con esos flujitos hermosos!!”, le dije a Romi. “Chupáme por favor, chupáme que acabooo!!!”. Caro chupó un rato y después manoteó el consolador.
“Ahora te voy a coger, querés, putita?”, le dijo. “Si! Metéme el consolador. Cogéme toda amiga!!”, contestó sacada. Caro le entró a dar. “Cogeme…Ahhhhhhh ay asiii, toda adentro… lléname toda la concha”, decía Ro entre acabadas. “Ayy pendeja, aacabá toda putaaa, te estamos cojiendo los dos y pedís mássss, qué puta que sos, tomá puta tomá…”. “Si dale, acabo, acaboooooooo!!!!!”, gritó Romi. “Si dale, dale, mojáte toda. Ayyyy seeeee después de esto te toca a vos comerme la concha mientras Maxi me hace el culo…”.
Yo no pude más y le entré a acabar a los gritos en el culito a Ro. Caro me pidió que saliera. Pensé que le iba a chupar la leche del culo a Romi pero en vez de eso le metió el consolador por el culo y se lo puso a vibrar mientras subía a comerle las tetas.
“Pendeja, que lindas tetas mirá como las tenés, todos los pezones duritos, que lindo!”, le decía. “Ayyy, acabo otra vezzzzz!… cogeme más fuerte que acabo… dale que no aguanto!… ahhhhhhhhhh siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii hija de puta… como me gusta…”, gritó Romi y tuvo el tercer polvo por el culito.
Después nos fuimos los tres a bañarnos juntos. Un quilombo divino. Y la fiestita siguió, con Caro enterrándose la pija por el orto, sentada arriba mío, mientras la pendeja le enchufaba en consolador por la concha y le chupaba el clítoris.
“Me quedé recaliente y con ganas de más fiestita”, le confesé al final. “¿Tenía ganas de coger con ella?”, preguntó Romi. Como me pareció que era más de curiosidad que de celos, le dije que me había calentado que ella nos mirara coger y que me hubiese gustado lo mismo pero al revés.
Sabía que la pendeja se había soltado un montón, por eso no me sorprendió escucharle decir que a ella le hubiese gustado que Caro se quedara un rato más. “Creo que no me hubiese dado celo que te la cogieras”, me dijo. Lo que siguió fue yo tirando preguntas para ver hasta donde daba la cosa, hasta que me di cuenta que era al pedo. En la cancha se ven los pingos (y yo estaba seguro que una vez en el baile, la pendeja se prendía en todo).
Conclusión: al día siguiente la llamé a Caro, le di las gracias. Pero ella me dijo que no hacía falta porque lo había pasado de puta madre, y le quemé un cachito la cabeza con que había que repetirlo e ir por todo. “¿Qué es todo?”, preguntó Caro. “Que la pendeja te coma a vos, y que se banque sin problemas que te rompa el culito delante de ella”, contesté.
“Hijo de puta, me voy ya a hacer la paja pensando en eso!”, me contestó Caro. Le dije que en la semana lo hacíamos. Quedamos para el viernes, porque era el día que Romi la careteaba en su casa con que salía con las amigas, y en realidad se quedaba a dormir en la mía (la vieja estaba avivada pero se hacía la boluda).
Yo me fui del laburo volando a casa para ordenar todo, comprar algo para picar y bebidas, y recibir a Caro que se vino más temprano. “Te la quiero chupar un ratito yo sola”, me dijo. La dejé, obvio. “Te gusta como te como la pija?”, me preguntaba ella mientras yo pensaba en lo que se venía.
Tenía toda la pija ensalivada, me chorreaba hasta los huevos y la muy puta me masajeaba las bolas. “Me encanta que sos reputa, tan puta que ahora cuando llegue mi novia le vas a comer el culito adelante mío”. Esa frase la puso a mil y siguió chupando para hacerme acabar. Pero yo me contuve bien.
La nena llegó a los 10 minutos. La muy perrita estaba con uniforme. Se ve que lo había hecho no sólo para calentarme a mi, si no también a la “lesbi” de Caro. O para dejar en claro cual era la nena y aprovecharse de eso.
Y dio resultado porque apenas entramos a casa después de haber venido conmigo a los besos en el ascensor, a Caro se le iluminaron lo ojos. Se fue hasta Romi y le dio un piquito mientras la agarraba por la cintura. A Ro esto se ve que la tomó por sorpresa, porque se quedó medio dura.
“Sos hermosa Ro, pensé en vos toda la semana”, le dijo Caro y la pendeja se puso toda colorada. Sin dejarla pensar, Caro le comió la boca y la nena respondió al beso abriendo los labios y dejando entrar en su boquita la lengua de Caro que a los segundos se enroscó con la suya.
Yo estaba ya como loco y con la pija paradísima. No sabía si ir corriendo a buscar la cámara de fotos. Pero no quería perderme un segundo. Ví como las manos de Caro le agarraban el culo a Romi metiéndose por debajo de la pollera tableada y le apretaban las nalgas, mientras seguían transando.
Cuando se separaron para respirar Caro le preguntó: “con esa tanguita fuiste al cole?”. “Si”, contestó Romi tímida, desbordada por el encare de Caro. “A ver, mostrámela”, dijo la otra. Romi se dio vuelta y se levantó un toque la pollerita tableada. “Maxi ya la conoce”, dijo Ro. “Pero yo no, a ver dejame ver”, contestó Caro que se arrodilló a la altura del culito de la pendeja mientras me tiró una mirada cómplice.
-Uiaa! Que linda!!
-Te gusta?
-Si nenita…, pero tu colita se la está comiendo toda!
Ro y yo largamos una risa mientras Caro actuaba bien putita y nos hacía el show.
-Te la voy a sacar de adentro, si?
-….
-Así, así… (decía Caro que le abría la cola con una mano y corría la tanguita con la otra). Mmm! Qué lindo culito que tenes!,- y para ver más el ojete chiquitito había corrido la tanga un poco más para el costado.
-Qué guacho Max, no puede ser…mirá lo que te vas a comer!,- me dijo después mirándome. Yo no contesté, estaba hipnotizado.
-Le vas a dar por el culito?
-Vos qué creés?, le contesté
-Querés que Maxi te rompa el culito?, le preguntó a Romi.
-Si
-Entonces abrilo bien…que te lo chupo todo…, dijo sacándo la lengua y le entró a chupar el orto a Ro.
-Mirá que lindo ojete que tiene! (me decía) Mira cómo se abre! Lo estoy abriendo para vos.
-Te gusta?,- le dije.
-Siii!!!
-A vos mi amor, te gusta como te come la colita mi amiguita?
-Si me encanta, ahora es mi también es mi amiguita,- me contestó jodiéndo.
-Ayyy…son 2 putitas…cómo me hacen calentar putas!!!
-Ahhh!!!,- largó Ro mientras Caro le cogía el culito con la lengua y le metía un dedo en la concha.
“Mmmmm!”, emitía Caro. Después me miró y me dijo que le alcanzara la cartera. Mientras yo fui a agarrarla del sillón donde la había dejado le pidió a Ro que se pusiera en cuatro en el sillón y siguió comiéndole el culo. Alternó con la rajita de la concha que estaba mojada, y se mojó un poco más.
Cuando le acerqué la cartera la abrió y sacó un chiche. “Hoy vine preparada”, me dijo. “La vez pasada extrañé a mi amante a pilas”, se rió. Pensé que se lo iba a meter en la concha pero lo chupó y se lo puso en la argollita a Ro que miraba por sobre el hombro.
Al toque volvió a meterle la lengua en el culo, y eso fue lo que terminó por calentar a Ro que largó un “AAAAAAhhhhhh” mientras Caro la seguía cogiendo con el consolador que traía en su cartera.
-Viste papi como me cojo a tu nenita?,- me dijo Caro mientras Ro empezaba a mover el culo en señal de que le gustaba.
-Te gusta putita?, le preguntó a Romi.
-Ahh…siii… sí me encanta
-Tocáte un poquito la conchita mientras te como la colita…
- Ahh, ahh, ahh, siii, siii, qué lindo…,- decía Ro.
-Qué puta que sos, sos re pajera, no?,- le preguntaba Caro. -Sí soy repajera!
-Te gusta bebé? Te gusta tocarte?
-…. (Ro estaba concentrada en la paja que se estaba haciendo).
-Contéstame putita!!
–Sí, me encanta tocarme…, y me encanta lo que me hacés...
-Así te gusta? Siiiií, tocáte la conchita con más ganas bebe…así…así…mmm…
Cuando Ro parecía que estaba apunto de acabar Caro le sacó el vibro de la concha y le pegó terrible chupada de argolla mojándose ella toda la cara con el flujo de la pendeja y su propia saliva. Romi estaba como loca. “Quiero ver cómo te haces la paja. Metéte los deditos putita”, le dijo Caro, y Ro obedeció. Caro le chupó otra vez el orto. Yo mientras, ya estaba en pelotas y haciéndome la paja viendo el espectáculo.
Cuando no pude más de eso las agarré a las dos y les dije de ir para el cuarto. Abrí la cama desarmándola por completo, y las acosté a las dos juntitas boca arriba y me las transé alternadamente. Le chupaba las tetas a una, luego besaba a la otra. Al final Caro se prendió a las tetas de Romi mientras yo la besaba. Y cuando yo paré de transarla a la pendeja, se la comió ella.
“Qué tenés ganas de que te hagamos?”, me preguntó Ro. “Quiero ver cómo se tocan mirándome la pija”. Ro rezongó. Tenía ganas de que se la metiera. “Mirá la pija que te vas a comer en un rato y pajeate”. Las dos juntitas se entraron a frotar el clítoris. Caro con las piernas abiertas. Ro más juntitas. Le pedí que las abriera. Las dos tenían la argolla brillante por los juguitos.
“Ahora quiero que Caro te chupe los deditos mojaditos que tenés y vos le chupás los deditos a ella”, le pedí a Ro. Caro le agarró la mano a la pendeja que dudaba y se metió los deditos en la boca chupándolos como si fueran una pija. Después le acercó los dedos de ella (el índice y el mayor, que se los había metido bien en la concha), y la pendeja los chupó, primero despacito y con vergüenza. Y después con más ganas.
“Uyyy como me calentó eso!!!”, dije yo mientras a Ro se le dibujaba una sonrisa. Me acerqué y la besé. Después me incorporé y mirándola a Caro le dije: “Dale abrite bien de piernas que tu nueva amiguita te va a meter la lengüita en esa conchita hermosa que tenés…”. Ro me miró. “Quiero que le chupes la concha a tu amiguita…(Ro dudaba), dale mi vida…”. “Vos querés?”, le preguntó a Caro. “Si, mal”, contestó. “Dale mi amor, dame el gusto…”, insistí. Ro ya se estaba acomodando. “Asii mi amor, coméle la conchita”.
Tímidamente sacó la lengua y la pasó por la rajita húmeda de Caro que gimió. Ro empezó a ir y venir por la conchita, pero sin hundirle mucho la lengüita. Le daba besitos por el costado. Caro se abrió más de piernas flexionando un poco las rodillas y se abrió la cajeta como diciéndo “vení pendeja, a comerlaaaa”. La nena le dio el gusto con un langüetazo largo desde el agujerito hasta el clítoris.
Yo no aguanté más, me le fui de atrás a Ro que estaba arrodillada en cuatro y le acomodé la pija en la concha a la pendeja que paró el culo para que le entrara toda. Tenía la argolla recaliente y mojada. Me la entré a coger con toda la pija adentro, sacando sólo unos centímetros y rebotando contra su culo mientras ella iba poniéndole más onda a la chupada de concha.
-Siiiii, qué lengua suvecita, me encanta que me coman la conchita, ahh, si Romi seguí. Que putita…meteme un dedito en la cola, ahiií…,- entró a largar Caro que se puso terriblemente caliente.
-Siiii, Chúpame la conchita y la colita mi amor. Qué bien lo haces! Méteme un dedito en la colitaaaa….,- volvió a pedir, pero Ro se ve que no se animaba a meterle el dedo en el orto a Caro.
-Chúpame pendeja!! Hazme gozarrrrr!!! Dame másssssss!! Dame más lengua, más lengua!!
-Dale mi amor, coméle toda la concha a esa puta de mierda! Dale que la vas a hacer acabar a los gritos!
-Cógeme con tu lengua, seguiiiiiiiii asiiiiiiiiiiiii, más, más, másssssssssssssss!!,- gritaba Caro sin poder controlarse. La cantidad de flujo que largaba su argolla era tremendo.
-Ahora cogéme el culito con esa lengua preciosa!!!,- pidió Caro otra vez. Ro le dio finalmente el gusto.
-Aaaahhhhhhh!!! Seeee!!!! Ayyy qué lindo…. qué lindooo!
-Te gusta, amiguita?-, preguntó Ro que ya estaba recaliente también (tenía la concha abierta y mojada, y estaba casi seguro de que le había robado un polvito mientras se la chupaba a Caro).
-Me encanta!! contestó Caro.
-En serio te gusta cómo te lo hago?
-Si mucho, pero muero porque me metas dos dedos por la colaaaa….
Ro le dio el gustito y después le entró a comer la concha. Caro le acabó a lo loca. Mientras la pendeja acabó otra vez con mi pija en la concha. “Estoy re caliente!!!”, dijo Caro. “Y tengo muchas ganas de ver otra vez como Maxi te rompe el culo!”, agregó.
“Yo quiero ver como te rompen el culo a vos también!! Querés?”, le contestó Ro con los dedos dentro de su ojete. “Sí, sí! Quiero que me tu novio me rompa el culo!”, contestó. Yo no lo podía creer. Había creado dos monstruos. “Vení mi amor cojétela por el culo”, me dijo.
Yo se la saqué de la concha a la nena que me hizo lugar entre las piernas de Caro. La abrí bien, agarré la pija, la ensalivé, y le acomodé la cabeza en el orto. Y se la dejé ir despacito pero sin aflojar hasta que le entró toda. La guacha gritó y se revolvió de dolor y placer. Yo estaba sacado. Había aguantado un montón viéndolas a las dos tortear (y me había gustado, claro).
Había llegado el momento de coger a lo bestia, y estaba particularmente caliente con Caro por cómo la había llevado a Romi a comerle la conchita y cogerle el culito con los dedos (una fantasía que teníamos los dos). Quería darle con todo, y que no se pudiera sentar por una semana.
Ro miraba embobada cómo gozaba su nueva amiga.
-Ayyy, que buena pija
-Te gusta trolita?, le pregunté
-Síiii, pero me duele un poco…
-Ahhh te duele puta? Ahora te va a doler más!
-Ayyy que hijo de puta que sos!
-Te voy a partir en 4 putita…
-Sí partíme..
- Te voy a mandar para Miami con la cola abierta como una cacerola!
-Si dalee
De un sáquele enterré toda mi verga en el culo divino ese
-Ayyyy dale hijo de puta
-Te gusta?
-Dame, dame más fuerte…
Empecé a darle con todo, le bombeaba ese ojete a una velocidad descomunal.
-Ayyy dios! Así hijo de remil putas!
-Te gusta como te cojo el orto?
-Si hijo de puta, tenés una pija bárbara!
-Dale las gracias a Romi que te la presta, ésta pija es de ella…,- dije para que no se pusiera celosa.
-Gracias Ro, gracias amigaaa!! Ahhh.. aahhhhh… ahhhhhhhhhh!!!
-Querés ver cómo la hago gritar?,- le dije a Ro.
-Si, hacéla gritar, que grite mucho como grito yo cuando me hacés la cola!,- intervino Ro para ponerme loco.
Le entré a descocer el culo a pijazos s Caro que estaba con las patas flexionadas cerca del pecho para que mi pija le entrara toda en el orto.
-Asiiiií! Fuerte, fuerte!,- largó Caro complacida.
-Toma puta!!!! Toda en el orto!!! Toda en el orto!!!
-Ah, ah, aaaahhhh. Ay animal me matas, me estás reventando. Qué calentura que tengo! Qué bueno es!
-Te gusta hija de puta? Te gusta como te estoy rompiendo el orto de puta que tenés?
-Siiiii me encanta, dame mássss!!!!
Le seguí dando, un par de minutos más y cuando no aguanté más le saqué la pija del culo. “Date vuelta que viene lo que vos querés”.
-No, no me dejes así, llename de leche!!
-Ssssss, calláte bebé. Vení, vení que te vas a tomar toda mi lechita con esa boquita de puta que tenes!!
Se acercó. “Abrí la boca que si no te voy a bañar de leche!!”, le dije. Abrió la boca y se la metí. Morbazo absoluto al saber que se la había sacado recién de culo. La puta se la comió hasta dejarla limpia y mojada.
Entonces me pajié rápido, le pedí que abriera la boca y le tiré tres o cuatro chorros le lechita caliente. La puta se la tragó y me peteó un rato más hasta dejarme seco. Después la buscó a Ro que estaba con una mano en la concha tocándose. Y le metió la lengua mientras la besaba.
La pendeja se había quedado recaliente y no dejaba de tocarse. Y a mi la pija se me empezó a poner morcillota de nuevo. Caro se avivó y le pidió que se acostara en la cama con las piernas abiertas. “Mostráme como te pajeas pendeja que nos ponés a los dos al palo”, le dijo. Y Ro se entró a tocar la argolla bien abierta.
Caro le besó la pancita y después bajó chupando cada centímetro de piel hasta llegar a la entrepierna. Le chupó la cara interna de los muslos, y siguió bajando hasta los pies. Se metió los dedos del pie en la boca mientras la miraba a Ro a los ojos. Después hizo el camino inverso con su boca a lo largo de las piernas y llego a la conchita.
Con sus manos le abrió otra vez las piernas a Romi y comenzó a acariciarle toda la argolla con la mano abierta, hasta que le coló un dedito en la conchita. “Estas muy caliente bebé!”. Entonces se acomodó y le entró a comer la almejita divina mientras yo me sobaba la pija que ya estaba a media asta. Pero lista para entrar cuando me lo pidieran
-Dios mío!!! Que hermosa sos!!! Que conchita más linda tenés amiguita!!! Te gusta como te hago?
-Si mucho
-Bueno, entonces me voy a comer todo esto!! Te voy a pegar la chupada de concha de tu vida pendeja!!
-Ah, ah, ah, ahh, aaaaaahhhhh!!,- fue largando Romi hasta acabarle en la boca a Caro.
-Uyyy amiguita me acabaste toda en la boca!
-Si me encantó!!!
-Ya veo….., te chorrea hasta el culo! Miraaá!!! Miraaá!!! Mirá como te entra de fácil el dedito!!! Que rico!!!
-Ayyyyy,- largó Ro
-Siiii, abríle el culito que mi pija ya está lista!,- intervine yo.
-Dale vení Max, rómpele el culito,- dijo Caro agarrándome la pija y guiándola al hambriento ojetito de Romina.
-Cógeme el culito papi que está bien calentito!!!!.
-Tomála mi amor, ahí va toda para adentro!!!
-Ayyyyyyyyy siiiiiiii ahhhhhhhh!!!!!!,- gritó Romi mientras la mitad de mi pija se le enterraba en el orto.
-Siiiiiiiii puta siiiiiiii
-Ahhjjjjjjj…. aaaaaaahyyyyyyyy…. aaaaaaaayyyyyyyyyyyy
-Si papi que la sienta!!!! Cojete esa pija puta!!!,- le decía Caro amasándole las tetas. Yo me había quedado quieto esperando que la pendeja que aflojara.
-Dale papito, rompéselo todo que a ella le gusta!!,- insistió Caro otra vez.
-Cogéme mi amor!!!,- me pidió Romi.
-Ayy pendeja, cómo te gusta la verga!!,- dije yo y le enterré lo que había quedado de pija fuera del culo.
-Ahhhhhhhhh…..aaahhhhh…, largaba Romi
-Un poquito más y te la comes toda!!!!,- la alenté yo, y empuje lo que faltaba por meter, hasta que los huevos chocaron con su culo.
-Siiiiiii…Siiiiiii…entró!!!! Me la comí tooooodaaa!!
La llené de besos, estaba enamoradísimo de la pendeja en ese momento. Cuando me di cuenta, quise emparejar las cosas y la busqué a Caro para ver que hacía. La muy puta se chupaba un dedo y se lubricaba el ojete. “Mirá mi amor, mirá como se calentó tu amiguita con nuestra cojida”.Caro se metía sus dedos en el culo mientras yo seguía trabajando en el agujerito de Romi.
-Déjame ponerme en cuatro así me la como toda…. ahhhh…ahhh…,- me pidió Ro al rato.
-Dale, así Carito también puede ver cómo te rompo esa colita hermosa…
-….(Romi se rió)
-Eso querías no?
-Las dos cosas….(más risas).
-Vení puta abrile el culo a mi novia así ves cómo se come toda mi chota por el orto
-Siiii abrime la cola amiga!, pidió Ro.
-Uyy como tenés esa colita! No te arde?,- preguntó la puta de Caro con obvias intenciones, que Romi no entendió.
-Siii un poco me arde, me hace falta le lechita para lubricarlo,- dijo para mi sorpresa.
Le pedí a Caro que le chupara el culo a Romi y fui corriendo a la heladera, y traje un cartón de leche que estaba abierto. Y manotié el chiche de Caro que había quedado en el living. “Tomá, abrile un poquito el culo con esto así le riego después la colita con leche”, le dije a Caro cuando volví al cuarto.
La trola le chupó el culo a mi novia y le metió despacito al chiche mientras le pajeaba el clítoris con la otra mano. “Uyyy bebé, te estoy culiando!”. “Si, me hacés la colaaaa!”, contestó Ro. “Que par de putitas que son!”, dije yo que no lo podía creer. “No te enojes mi amor, a tu pija no le gana nadie”, me dijo Romi. “Querés la lechita por el culo bebé?”, le dije. “Si, mojámelo y después cojeme la cola que quiero acabar otra vez”.
Caro le sacó el chiche del culo y le separó bien los cachetes para que el hoyito quedara abierto. Yo despacito y tratando de no manchar todo, le fui tirando un chorrito de leche en el culo. Parte se coló y parte chorreó a las sábanas, pero no me importó nada. Otra vez le metí el consolador en el culo y se lo saqué. Y otra vez le tiré leche. Esta vez entró casi toda.
Entonces fui por la vaselina de la mesita de luz y me unté la pija. Me le acomodé atrás y ante la mirada expectante de Caro le fui metiendo la pija en el orto a Ro otra vez.
-Ahhhhh….. siii…aahhhhhh…,- decía Ro
-Te gusta putita como te da papi por el culo?,- pregunté, mientras mi cabezota llegaba hasta el fondo.
- Mmmm…ahhh…. Me…me…volves loca papi!!!! ahhhh…ahhhh…
-Sentís la lechita en culo….
-Siii la siento
-Ayy no puedo más!!!, dijo Caro. La vi y estaba metiéndose el vibro por el orto.
-Vení puta ponéte en cuatro al lado de ella que me las cojo un rato a cada una…
Mientras Caro se acomodaba le di con ganas a Romi para que gritara un rato. Después me le fui de atrás a la otra y sin ningún trabajito más que ponerle un poco de vaselina se la enterré toda. “Te la tragaste toda por el culo putita… jaaaaa….”, me reí mientras ella me puteaba y gritaba de placer.
-Que buen culo tenes puta! Estás apretadita todavía! Pero te lo voy a dejar bien abierto! Mirá putá, mirá como te rompo el orto! (casi se me escapa decirle, “como se lo rompí también a tu hermana”. Por suerte me contuve).
-Si! Me estás matando hijo de puta! Dame más despacio!
-Despacio las bolas! A las putas como vos y como mi bebé les gusta sentir la pija hasta el fondo! No putita?,- le dije a Romi que se había puesto de rodillas para mirar de cerca.
-Si papi, dásela hasta el fondo!,- contestó. Le di un beso de lengua recontra calentón mientras seguía el mete y saca.
-Ponéte en cuatro putita que te toca de nuevo!
Romi obedeció y se puso otra vez en cuatro en la cama al lado de Caro. “Abrite el culito con las dos manos bebé”. Lo hizo. “Uyy mirá lo que es esto!!! Vení trola mirá este culito!!!”, le dije a Caro después de sacársela. “Es hermoso Max, que ganas de tener un pija para cojérmela también!”, contestó la guacha mirándole el culo y besándolo. “Acá tenés una pija, vení cométela!”, le dije acercándole mi chota (medio manchadita). La miró y se la comió toda. Que puta por dios!!!!!
Pero no la quería hacer esperar a Romi así que le apliqué un cachito de vaselina otra vez y se la dejé ir. Del dolor se dejó caer en la cama. La besé en el cuello y después me la entré a coger. Caro se acostó al lado, y la acariciaba y le daba besos. Al rato Romi entró otra vez en el juego y la besó. Entonces, y sin sacársela, la puse onda cucharita y me la seguí cojiendo, mientras Caro, que entendió rapidísimo, bajó a comerle la concha.
-Mmmm pero que putita que sos…mirá como te estás mojando,- dijo Caro tras unos langüetazos.
-Te gusta mi amor lo que te hace Carito?,- le pregunté.
-Siii mi amor, me encanta esto,- dijo Romi.
-Nunca me cogí una nenita como vos…y me gusta que seas bien putita…, te quiero mucho bebé,- le dije yo.
-Y a mi no me querés nada?,- preguntó Caro.
-A vos también te quiero… para coger…
-Yo también te quiero para coger…
-Dale puta, callate y seguí chupándole la conchita así acaba todo a los gritos.
-Sí háganme acabar que no puedo más!
-Abrila bien…que la chupo toda…,- dijo Caro y se zambulló de una a comerle la empanada.
Romi gozaba y acabó, pero los tres seguimos como veníamos. Cuando se cansó de chupar, Caro le metió dos dedos por la concha a Romi. “Mirate como estás…te estoy cogiendo con los deditos y te encanta… gritás como una putita… te gusta putita?”. “Si soy bien putita…y quiero que me cojan a full…”, contestó Ro.
Yo le aceleré la bombeada de culo. “Dale puta, acabame otra vez con la pija en el culo, dale, puta, dale.”. “Si cojéme mi amor, soy tu putita, hacéme acabar otra vez con esa pija grandota”. “Tomá puta, tomá, mirá como te rompo el orto”. “Rompémelo todo, es tuyo mi culo, todo soy tuyaaa!!!!!”, contestaba Ro al borde de otro orgasmo descomunal.
“No puede ser…cómo acabas bebé, mirá la nena que te estás comiendo guacho”, me decía Carito. “Pedíle a tu amiguita que te chupe otra vez la concha y mojale toda la cara con esos flujitos hermosos!!”, le dije a Romi. “Chupáme por favor, chupáme que acabooo!!!”. Caro chupó un rato y después manoteó el consolador.
“Ahora te voy a coger, querés, putita?”, le dijo. “Si! Metéme el consolador. Cogéme toda amiga!!”, contestó sacada. Caro le entró a dar. “Cogeme…Ahhhhhhh ay asiii, toda adentro… lléname toda la concha”, decía Ro entre acabadas. “Ayy pendeja, aacabá toda putaaa, te estamos cojiendo los dos y pedís mássss, qué puta que sos, tomá puta tomá…”. “Si dale, acabo, acaboooooooo!!!!!”, gritó Romi. “Si dale, dale, mojáte toda. Ayyyy seeeee después de esto te toca a vos comerme la concha mientras Maxi me hace el culo…”.
Yo no pude más y le entré a acabar a los gritos en el culito a Ro. Caro me pidió que saliera. Pensé que le iba a chupar la leche del culo a Romi pero en vez de eso le metió el consolador por el culo y se lo puso a vibrar mientras subía a comerle las tetas.
“Pendeja, que lindas tetas mirá como las tenés, todos los pezones duritos, que lindo!”, le decía. “Ayyy, acabo otra vezzzzz!… cogeme más fuerte que acabo… dale que no aguanto!… ahhhhhhhhhh siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii hija de puta… como me gusta…”, gritó Romi y tuvo el tercer polvo por el culito.
Después nos fuimos los tres a bañarnos juntos. Un quilombo divino. Y la fiestita siguió, con Caro enterrándose la pija por el orto, sentada arriba mío, mientras la pendeja le enchufaba en consolador por la concha y le chupaba el clítoris.
La violación de Silvina
Publicado por
fantasia fm
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Silvina estaba en su casa, sola, viendo tele, esperando a su
novio, pensando en lo bien que la estaba pasando desde la pasada semana.
novio, pensando en lo bien que la estaba pasando desde la pasada semana.
Tan solo 7 días atrás era una nenita de 15 años que ni
siquiera se animaba a decirle sus sentimientos a Joaquin y ahora cada ves que
tenían un rato solos se entregaban el uno al otro con una pasión increíble.
siquiera se animaba a decirle sus sentimientos a Joaquin y ahora cada ves que
tenían un rato solos se entregaban el uno al otro con una pasión increíble.
En la tele no había nada y Silvina decidió ir a bañarse.
Cuando ya estaba desnuda, a punto de entrar en la ducha, sonó el timbre. Como
estaba sin ropa, se envolvió en una toalla y fue a abrir. Era Pablo, un muchacho
grande, de color, amigo de Joaquin. Silvina le preguntó que precisaba a lo que
él respondió que quería hablar con su amigo, ella le dijo que no había llegado,
que lo esperara en el sillón. El negro se sentó y Silvina se fue a bañar.
Cuando ya estaba desnuda, a punto de entrar en la ducha, sonó el timbre. Como
estaba sin ropa, se envolvió en una toalla y fue a abrir. Era Pablo, un muchacho
grande, de color, amigo de Joaquin. Silvina le preguntó que precisaba a lo que
él respondió que quería hablar con su amigo, ella le dijo que no había llegado,
que lo esperara en el sillón. El negro se sentó y Silvina se fue a bañar.
Cuando salió de la ducha, fue a su cuarto a vestirse. Se puso
una bombacha roja tipo tanga que había comprado para darle una sorpresa a
Joaquin, unos jeans apretados y una remera justa sin sutien. Su plan era que
Joaquin arreglara rápido sus asuntos con el negro para después estar solos y
poder disfrutar.
una bombacha roja tipo tanga que había comprado para darle una sorpresa a
Joaquin, unos jeans apretados y una remera justa sin sutien. Su plan era que
Joaquin arreglara rápido sus asuntos con el negro para después estar solos y
poder disfrutar.
Se perfumó y fue al living, se sentó y comenzó a hacer
zapping con el control.
zapping con el control.
El negro al verla quedó deslumbrado, Silvina era perfecta,
sus curvas lo excitaban de manera incontrolable. Enseguida sin poder evitarlo
tubo un enorme erección, intentó disimularlo, pero su miembro no era
precisamente pequeño y la tarea se dificultó.
sus curvas lo excitaban de manera incontrolable. Enseguida sin poder evitarlo
tubo un enorme erección, intentó disimularlo, pero su miembro no era
precisamente pequeño y la tarea se dificultó.
Silvina lo noto inquieto y al mirarlo noto la erección, quiso
hacerse la distraída, pero era difícil, su pene era realmente enorme.
hacerse la distraída, pero era difícil, su pene era realmente enorme.
Para hacer algo Silvina se paró y fue a buscar agua, al irse
el negro se quedó embobado con el perfecto culo de la joven, lo cual acrecentó
su erección.
el negro se quedó embobado con el perfecto culo de la joven, lo cual acrecentó
su erección.
Silvina volvió y antes de sentarse el negro se paró la tomó
del brazo y la besó. Ella se soltó y le dio una cachetada:
del brazo y la besó. Ella se soltó y le dio una cachetada:
S.- ¿qué haces?
N.- tas bárbara pendeja.
S.- no me toques.
El negro la empujó y la tiró en el sillón, Silvina se puso
nerviosa, quiso pararse pero el negro la volvió a empujar y le dio una fuerte
cachetada.
nerviosa, quiso pararse pero el negro la volvió a empujar y le dio una fuerte
cachetada.
S.- ¿qué haces?
N.- Te voy a hacer un poquito de lo que el Joaco me contó que
te hace.
te hace.
S.- no por favor, no me hagas nada.
Pablo se le tiro arriba y empezó a besarla y acariciarla por
todos lados.
todos lados.
N.- que rica que sos pendeja.
Silvina llorando le pedía que la dejara.
El negro le levantó la remera y lamió sus pezones dándole
pequeños mordiscos.
pequeños mordiscos.
N.- tenés unos pezones deliciosos.
S.- por favor dejame, no seas malo.
El joven seguía acariciando y chupando los pechos de Silvina
cuando decidió pasar al siguiente nivel. Se bajo el pantalón y dejó al
descubierto un pene de increíbles dimensiones. Lo agarró con una mano y con la
otra tomó la cabeza de Silvina.
cuando decidió pasar al siguiente nivel. Se bajo el pantalón y dejó al
descubierto un pene de increíbles dimensiones. Lo agarró con una mano y con la
otra tomó la cabeza de Silvina.
N.- comételo, pendeja, comételo todo.
S.- no, no, correte.
N.- dale chupámelo un ratito.
S.- no, salií
Silvina no se la quería chupar por lo que el negro se corrió
un poco y se agachó para desabrochar el jean de la joven.
un poco y se agachó para desabrochar el jean de la joven.
Cuando terminó de desabrocharlo comenzó a quitárselo
descubriendo la tanga.
descubriendo la tanga.
N.- mira la tanga que tenés, que puta que sos.
S.- me la puse para Joaquin.
N.- no perra te la pusiste para mi.
Pablo la levantó sin terminar de sacarle el jean y la tiró de
espaldas sobre el respaldo del sillón. Se puso detrás de su víctima y comenzó a
frotar su pene contra la vagina de Silvina cubierta por un hilito de la tanga.
espaldas sobre el respaldo del sillón. Se puso detrás de su víctima y comenzó a
frotar su pene contra la vagina de Silvina cubierta por un hilito de la tanga.
Inevitablemente la chica se humedeció por lo que el negro
colocó la cabeza de su descomunal pija en la entrada de la concha y empezó a
presionar.
colocó la cabeza de su descomunal pija en la entrada de la concha y empezó a
presionar.
Poco a poco fue entrando, cada centímetro de verga que
entraba en la concha de Silvina le desprendía un grito de dolor. Cuando toda
estaba adentro el negro se la
entraba en la concha de Silvina le desprendía un grito de dolor. Cuando toda
estaba adentro el negro se la
sacó y empezó todo de nuevo.
S.- sacámela, me estas matando
N.- si puta vas a saber lo que es un pija de verdad
S.- me duele mucho sácamela
N.- ni lo sueñes
El negro se la cogía con demencia la sujetaba de las caderas
y se la sacaba y metía con fuerza, la concha de Silvina estaba que reventaba, la
semana pasada era virgen y ahora tenía terrible pene destrozándola.
y se la sacaba y metía con fuerza, la concha de Silvina estaba que reventaba, la
semana pasada era virgen y ahora tenía terrible pene destrozándola.
Cuando el joven estaba por acabar se la sacó y la colocó en
la entrada del ano de la chica.
la entrada del ano de la chica.
S.- no por favor por el culo no.
N.- claro que si pendeja te lo voy a romper como tu
noviecito.
noviecito.
S.- la tenes enorme, me vas a matar.
N.- quedate traquila, te va a gustar.
S.- si queres te la chupo, pero no me la metas en el culo.
Al negro le gustó la idea y abandonó la cuevita trasera
de Silvina y dándola
de Silvina y dándola
Vuelta puso su pene a la altura de la cara:
N.- dale, cometela todita
S.- no me entra es muy grande.
N.- dale puta, abrí la boca bien grande.
Silvina haciendo un gran esfuerzo comenzó a devorar el enorme
pedazo de carne negro que tenía delante.
pedazo de carne negro que tenía delante.
El negro se la empujaba hasta tocar el fondo de la garganta
de Silvina haciéndole dar arcadas.
de Silvina haciéndole dar arcadas.
De pronto Pablo dijo:
N.- mirame puta.
Cuando Silvina levantó la mirada vio como el negro le sacaba
fotos con una cámara digital mientras ella se la chupaba como la más barata de
las putas.
fotos con una cámara digital mientras ella se la chupaba como la más barata de
las putas.
El negro dejó la cámara y comenzó a coger la cabeza de
Silvina.
Silvina.
Ella sabía que estaba por acabar, y así fue. El primer chorro
de semen le dio con fuerza en la garganta, ella intentó zafarse y lo logró, pero
quedó enfrente de la pija, por lo que los siguientes chorros de leche le dieron
en la cara y el pelo.
de semen le dio con fuerza en la garganta, ella intentó zafarse y lo logró, pero
quedó enfrente de la pija, por lo que los siguientes chorros de leche le dieron
en la cara y el pelo.
N.- tas de viva putita, límpiamela.
S.- ¿que?
N.- Que me lamas la verga hasta que quede bien limpita.
Silvina llorando y con la cara llena de semen tomó la pija
del negro y la lamió como un helado.
del negro y la lamió como un helado.
N.- Bien putita, ¿te gusta no?
N.- ahora relamete la leche que tenés en la cara.
S.- no, por favor dejame limpiarme.
N.- lamete puta.
Silvina con los ojos llenos de lágrimas comenzó a sacar la
lengua y tragar el semen que le chorreaba por los pómulos.
lengua y tragar el semen que le chorreaba por los pómulos.
El negro acercó la pija a la cara de la joven y con la cabeza
de la verga recogía los restos de leche a los que Silvina no llegaba y se los
ponía en la boca. Silvina sin otra opción volvía a lamer la lechosa pija.
de la verga recogía los restos de leche a los que Silvina no llegaba y se los
ponía en la boca. Silvina sin otra opción volvía a lamer la lechosa pija.
Toda la limpieza de su verga puso a Pablo a full otra ves.
N.- ¿vamos a coger un ratito más?
S.- ¿no fue suficiente ya?
N.- claro que no, falta lo mejor.
El negro cerró la puerta del living con llave y fue a la
cocina, en seguida volvió con un frasco de aceite y se lo untó en toda la pija.
cocina, en seguida volvió con un frasco de aceite y se lo untó en toda la pija.
S.- ¿que haces?
N.- me lubrico la verga.
S.- ¿para?
N.- para que no te duela pendejita, ¿no soy buenísimo?.
N.- ponete como al principio, echada en el sillón dándome la
espalda.
espalda.
Silvina obedeció y levantó sus caderas ofreciéndole la concha
al negro para que así la pija entrara derecha y no le doliera tanto.
al negro para que así la pija entrara derecha y no le doliera tanto.
El negro se acercó y nuevamente comenzó a frotar la cabeza de
su pija entre los labios vaginales de la resignada Silvina.
su pija entre los labios vaginales de la resignada Silvina.
N.- ¿estas lista?
Silvina dijo que si levantando un poquito mas sus caderas.
Pero el negro saco su verga de la concha y la puso en la
entrada del culo.
entrada del culo.
S.- no, por favor me dijiste que no
N.- ¿y vos me creíste?
El negro se afirmó y le metió media pija de un saque. Silvina
creyó que se moría, el dolor era inmenso.
creyó que se moría, el dolor era inmenso.
S.- sacámela, sacámela.
N.- no puta, no
S.- ahhhhhhhhhh
N.- si puta gozá, gozá
S.- me lastimas, sacámela.
N.- ni en pedo brisca.
S.- Ahhhhhhh, me rompes el culo, sácala
N.- no puta te voy a coger hasta dejarte el orto como un
balde.
balde.
El negro presionó y se la metió toda, Silvina se desmayó de
dolor.
dolor.
El negro tomo con fuerza sus caderas y se la cogió como si
fuera un muñeco de trapo, Silvina rebotaba de un lado a otro con la verga
siempre hasta el fondo de su ano.
fuera un muñeco de trapo, Silvina rebotaba de un lado a otro con la verga
siempre hasta el fondo de su ano.
Pablo le tiró con agua que había en la mesa y Silvina
recuperó el conocimiento para darse cuenta de que todo era real, el negro se la
seguía clavando por el culo.
recuperó el conocimiento para darse cuenta de que todo era real, el negro se la
seguía clavando por el culo.
Él se la sacó y la dio vuelta para que ella se sentara en su
pija, Silvina quiso sentarse de tal forma que el negro la cogiera por la concha.
pija, Silvina quiso sentarse de tal forma que el negro la cogiera por la concha.
N.- por ahí no putita.
S.- no seas así
N.- no puta, te toca culito
El negro la levantó, la tomó de las caderas y le pasó un
largo lenguazo por la concha
largo lenguazo por la concha
N.- que rica concha que tenés
S.- si, chupame la concha, ¿no te gusta?
N.- me encanta, pero tu culo es más rico
La apretó con fuerza y la bajo hasta que su ano toco la
cabeza de su pija.
cabeza de su pija.
N.- dale pendeja, cojéme
Silvina bajaba lentamente introduciendo de a poco el
gigantesco pene en su dolorido ano cuando el negro presionó y se la metió toda
de un saque.
gigantesco pene en su dolorido ano cuando el negro presionó y se la metió toda
de un saque.
S.- ahhhhhhhhhhhh, no aguanto más
N.- si te gusta puta, sos la mas puta de todas y tenés un
culo ideal para que se lo cojan.
culo ideal para que se lo cojan.
N.- dale subi y baja como sabes.
Cuando Silvina subió intento zafarse, pero fue peor porque
cuando la tenía casi afuera el negro la agarró y se a metió toda de un golpe.
cuando la tenía casi afuera el negro la agarró y se a metió toda de un golpe.
Silvina se dio cuenta de que lo mejor era moverse lo menos
posible. Se sentó completamente en la pija guardando dentro suyo los 27 cm. de
carne.
posible. Se sentó completamente en la pija guardando dentro suyo los 27 cm. de
carne.
Cuando tubo la verga completamente dentro comenzó a mover sus
caderas de forma circular.
caderas de forma circular.
N.- ves como te gusta
Silvina dejaba escapar sollozos de solor.
S.- ahhh ahhhh ahhh
N.- puta, sos una puta.
S:- ahhh ahhh ahhh
N.- movete más pendeja puta
S.- ahhh ahhhh ahhh
N.- así baratita, te acabo, te acabo
S.- ahhh ahhhh ahhh
La joven sintió la pija del negro como una manguera, la
cantidad de leche era increíble, quiso soltarse pero el negro la apretó para que
toda la leche se le metiera bien adentro.
cantidad de leche era increíble, quiso soltarse pero el negro la apretó para que
toda la leche se le metiera bien adentro.
Silvina creyó que se desmayaba de nuevo pero no fue así. El
negro terminó de eyacular y le sacó la pija, luego la empujó y la dejó en el
sillón.
negro terminó de eyacular y le sacó la pija, luego la empujó y la dejó en el
sillón.
Mientras el negro se vestía Silvina pudo ver como él le
tomaba fotos mientras ella yacía tirada chorreando leche por el culo.
tomaba fotos mientras ella yacía tirada chorreando leche por el culo.
Pablo se acercó y le mostró en el visor de la cámara las
fotos que le había sacado.
fotos que le había sacado.
N.- ¿son lindas no?
S.- sos un hijo de puta
N.- ojito con decirle a alguien porque todas estas fotos
pueden salir a la luz.
pueden salir a la luz.
Silvina se puso a llorar sabiendo que no podía hacer nada.
El negro se paró
N.- nos vemos, decile al Joaco que lo llamo después.
N.- no te olvides, ja ja.
En el micro
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fantasia fm
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Mi nombre es Anabella, tengo 24 años y a continuación me describo para que sepan como soy. Morocha, 1,55 mts de altura, tez blanca, dicen que muy bonita de cara, rellenita (algo que gusta mucho a los hombres), con un busto tirando a grande para mi cuerpo y unos pezones grandes y rosados que responden de inmediato a cualquier estímulo y si los besan mejor, pero lo que realmente vuelve locos a los hombres, es mi cola, paradita, de caderas anchas y redonda, cosa que además me encanta entregar si un tipo me calienta lo suficiente.
Esto sucedió en el mes de noviembre que tuvimos que viajar al interior ya que mi novio es músico y tenía que tocar en un festival.
Estábamos, mi novio y yo, viajando para Córdoba a un festival, en un micro de larga distancia, que por ser fuera de temporada iba bastante vacío.
El micro era de esos que tienen dos pisos (arriba todo el pasaje y abajo el baño y solo seis asientos, pero entre estos dos una puerta para no molestar a los pasajeros), arriba viajaba toda la banda y demás pasajeros y abajo nos tocó a nosotros solos.
El viaje se daba tranquilo, serían como las tres de la madrugada, mi chico estaba totalmente dormido (yo no duermo en los micros, no puedo) y yo leía un libro, cuando veo que baja alguien, que creí que iba al baño.
Cuando siento que abren la puerta del compartimiento, levanto la cabeza y veo un muchacho de unos 26 años, morocho y fornido, que hizo que mi conchita sintiera cosquillas.
Me mira, me sonríe y me dice - te molesto si me quedo acá, arriba hay unos chicos que no me dejan dormir - yo contesto - no hay problema, sentate donde quieras - y escuchando esto se sienta en el asiento delante del mío. Continué leyendo cuando escucho que el muchacho me pregunta si no tenía algo para leer que le prestara, ya que se le había ido el sueño. Respondí que era lo único que tenía e instantáneamente él me pregunta mi nombre. Se lo digo y él me dice - yo me llamo Martín - y comenzamos a charlar.
Como mi novio estaba dormido me dice - por que no venís acá a mi lado así charlamos y no lo molestamos - me pareció buena idea y me fui a sentar a su lado.
Cuando pasé frente a él me desvistió con la mirada y eso me calentó. Yo llevaba puesto un vestidito corto (de esos que se abrochan completamente por adelante) un poco escotado, sin corpiño y unas zapatillas. Me quedaba muy bien, sobre todo en mi busto que dejaba notar mis grandes pezones y en mi cola que dejaba meterse algo de tela entre mis nalgas.
Viendo como me miró, antes de sentarme saqué cola y despacio me fui sentando (saben que me gusta calentar a los tipos). Una vez sentada me arreglé la falda obligándolo a que mirara mis piernas, él lo notó y me dice - sos muy bonita -, - gracias - digo yo, - no en serio, sos preciosa y si tu novio no estuviera acá atrás....- y no terminó la frase. Yo, algo excitada le digo - él está dormido y tiene el sueño muy pesado - sonriendo y sin mas me empieza a besar. Besaba estupendamente y sin esperar mucho comienza a acariciar mi pierna derecha. Yo, entregada al placer, abro mis piernas todo lo que puedo y él tomándolo como una invitación, mete su mano bajo mi falda y acaricia mi conchita sobre mi tanga.
Yo estaba hecha un lago y sin poderme contener se me escapa un -ssiiiiiiiiii- por entre sus labios. Me estaba volviendo loca y quería cogérmelo ya, así que me desabrocho cinco botones del escote, dejando libres mis pechos y mientras él empezaba a besar mis pezones, yo le abro el pantalón y saco su pene que se encontraba semi-erecto.
Era una locura, mi novio atrás durmiendo mientras Martín metía los dedos en mi concha (había corrido la tanguita), me besaba los pezones y yo lo masturbaba enérgicamente.
Todo eso realmente me excitó tanto, que le acabé en la mano, mientras él me besaba para contener mis jadeos.
Cuando me repuse, me acerco a su oído y le digo - ahora te toca a vos - él solo me sonríe maliciosamente.
Me arrodillo frente a aquella pija, que si bien no era muy grande (unos 18 cms) si era extremadamente gorda (no me cerraba la mano alrededor de ella), y sacando mi lengua, comienzo a lamerla en toda su extensión. Mi lengua la envolvía, subía, bajaba y ponía especial atención en la cabeza. Él me decía - que cara de viciosa tenés..... seguí.... sos increíble - y cerraba los ojos. A mí me encantaba tenerlo a mi merced, así que continué con mi labor, hasta que me rogó - metetela en la boca ..... por favor - y para no hacerlo sufrir mas, coloqué mis labios sobre la cabeza de su pene y de a poco me fui tragando aquella preciosidad, hasta que chocó con mi garganta. Generalmente me las trago todas, pero ésta era tan gruesa que apenas cabía en mi boca completamente abierta, la ventaja era que al no ser muy larga, casi tres cuartos de verga entraba en mi boca.
En mi vida no había visto pija que no pudiera tragarme por completo, así que tomándolo como un desafío comencé a mamarla hasta que chocara con mi garganta pero tratando de relajarme para poder tragármela toda. Él podía notar mi esfuerzo y sin poder controlarse me dice - sos increíble.... que placer me estás dando viciosa... como envidio a tu novio... - y sintiéndome mucho mas relajada me la saco y le digo - te voy a hacer la mejor mamada de tu vida.... de mí no te vas a olvidar jamás... - e inmediatamente vuelvo a tragarme esa gruesota verga, que ahora si logró pasar la barrera de mi garganta y mis labios chocaron con su vientre. Cuando pasó mi garganta mi cuerpo se estremeció y comencé a sentir un orgasmo, que continuó hasta que en tres o cuatro tragadas mas él acabara en mi interior.
Terminó mi orgasmo recién cuando engullí todo su semen, me la saqué de la boca y con mi mano embadurné su aparato con el semen que quedaba (en otro momento no hubiera desperdiciado ese manjar pero tenía una idea en mi cabeza y lo necesitaba lubricado), mientras él me decía - que puta, te tragaste toda la leche - y yo respondí mientras me relamía - Sí .... y me encantó.... es deliciosa ....-.
Para mi sorpresa empezó a peder la erección (no iba a permitirlo) así que mirándolo a los ojos le digo - a ver si esto ayuda a que se endurezca otra vez y si se levanta, tal vez le dé un premio - él sonrió, mientras yo me acomodaba su pija semi-erecta entre mis pechos y apretándolos con mis manos, comencé a masturbarlo con ellos.
Su pene desaparecía por completo y reaparecía entre mis pechos, provocándome una sensación divina, que al parecer, compartía con Martín.
Cada tanto, aprovechando que su aparato salía bastante, agachaba la cabeza y engullía gran parte de él, cosa que logró que volviera a un estado de dureza ideal.
De repente, sin decir nada, me levanto y meto mis pechos en mi vestido sin abrochar los botones, él asombrado me dice - ¿qué pasa? ¿Y su premio? - , - ah cierto, pero yo dije tal vez - respondí (solo trataba de histeriquearle un poco, nada mas) - pero se lo ganó, ¿no crees? - me dice - creo que sí, pero ¿qué le gustará como recompensa? - diciendo esto me paro de espaldas frente a él, me agacho hacia adelante y levantando mi pollera, le doy una imagen inmejorable de mi culo y mi conchita tapados por mi tanguita, que corro para descubrir ante él toda mi intimidad. Él acariciando mi culito me dice - sos hermosa -, - gracias, pero todavía no sabemos lo que quiere - respondo - a ver si nos dice - y diciendo esto acerco mi culito a su pene, lo apoyo en el orificio y presiono suavemente - ¿será esto? - pregunto jugando, - siiii, le fascina - y continuo, moviéndolo hasta mi empapada conchita, presionando hasta que la cabeza casi entra - ¿o esto? - a lo que me responde - también le encanta -, - entonces tendré que decidir yo, que premio se merece - diciendo esto, me siento hasta que su pene llegó hasta el fondo de mi vagina.
Comencé a cogerme aquel monumento de carne mientras su dueño decía - que delicia,... que apretada estas - a lo que digo - para esa pija todas somos apretadas,..... que placer me da,.... es hermosa - pero no quería terminar así y viendo que él acabaría pronto me la saqué y me volví a sentar a su lado. Martín asombrado dice - ¿no me vas a dejar así, no? -, - en ningún momento dije que el premio era hasta terminar - (lo estaba volviendo loco y eso me excitaba mas) - es mas, estoy algo cansada así que me voy a dormir. Fue un placer estar con vos y gracias por esa hermosa sesión de sexo.-.
Se me quedó mirando como un tonto mientras yo me levantaba y me dirigí al asiento de al lado de mi novio (yo quería seguir sintiendo aquella pija pero también me gusta jugar para que la excitación sea mayor). Me paro en el pasillo frente a los asientos y hago como que busco algo en el estante de arriba de ellos cuando siento aquella hermosa pija apoyada en mi culito y unas manos que toman mis pechos, mientras al oído me dicen - sé que deseas esto como nada en el mundo y quieras o no lo vas a tener bien adentro, a mí no me vas a dejar así - . Ni bien terminó de decir esto me obligó a agacharme hacia delante, me abrió de piernas, me arrancó la tanga y metió su cara entre mis nalgas, para empezar a chupar mi conchita.
Metía su lengua hasta el fondo y yo gozaba como una cerda (me encantaba que me obligaran y eso era lo que estaba buscando). Estuvo un rato así hasta que se acercó a mi oído y me dijo - ahora vas a saber lo que es gozar, putita, te voy a devolver el placer que vos me diste - automáticamente cambió su lengua por su durísimo pene y comenzó a cogerme con furia, es más, casi era una violación.
Yo gozaba como un animal, pero no era ahí donde la quería y así se lo hice saber, me giré y cuando se acercó le digo -aaaahhhhh,... metemela en el culo papito,... oohhh, la quiero en mi culooooo... aaaahh,... la ?necesito? en mi culooo... ahora, por favooooor,... papi -.
Tras un par de embestidas más me la saca y apoya en mi culito, comenzando a empujar para que éste se abriera. Me estaba volviendo loca, esa pija era muy gruesa y si bien mi culito estaba acostumbrado y se dilataba muy rápido (tengo sexo a diario con mi novio y siempre lo hacemos por ahí), me producía un placer increíble, tanto que cuando logró entrar la cabeza comencé una serie de orgasmos.
Él se detuvo para que mi agujerito se acostumbrara, no me gustó eso, así que lo miré y le dije - hasta el fondo.... rompeme el culo.... violame papito.... - y empujé para atrás, cosa que hizo que media verga me entrara y yo siguiera teniendo orgasmo tras orgasmo.
Martín empujó hasta que sus huevos pegaron en mi conchita y comenzó a cogerme tan violentamente como antes, yo continuaba teniendo orgasmos mientras él me tapaba la boca para que no gritara.
A los pocos minutos y tras penetrarme hasta el fondo, él acaba en mi interior diciéndome siempre al oído - tomá putita, ahí tenés más leche,... toda para vos.-, - siiiiii,.... la sientoooo... bien calentita.... me estas llenando todaaaaa - decía yo, mientras tenía un último orgasmo. Tras sacármela, yo apreté un par de veces mi esfínter para que saliera todo el sobrante de esperma. Lo tomé con mi mano y con la lengua me lo bebí todo, continuando con el restante en la verga de Martín. Aproveché que se estaba ablandando para tragármela completamente un par de veces mas y al dejarla, pararme para besar en la boca a mi amante ocasional.
Tras despedirse me dice - realmente, jamás te voy a olvidar, sos fantástica, de verdad lo envidio - y diciendo esto se fue.
Yo, mas calmada, me senté al lado de mi novio y mirándolo como dormía le digo - ¿te gustó? - él abriendo los ojos y sonriendo me responde - me encantó, mi putita, vos sabes que me vuelve loco verte en brazos de otro - me sonreí - te amo con toda mi alma y jamás lo disfrutaría tanto si no estuvieras conmigo - le digo.
Él comenzó a tocar mi desnuda conchita y me preguntó - ¿tanto te calentó, que gozaste como una cerda? - a lo que respondo - era muy lindo, no era un gran amante pero tenía una verga hermosa, en realidad sabía que nos estabas viendo porque tenés el sueño muy liviano y eso es lo que realmente me excitó tanto -, -te amo mi putita - y diciendo esto me besó.
Aprovechando que estábamos solos, hicimos el amor en todas las posiciones, me acabó en la boca, conchita y culito, me tragué toda su lechita y después de muchísimos orgasmos que me hizo tener (por mas que tenga todas estas experiencias, ninguno me hace gozar como él), nos dormimos hasta que llegamos.
Nos despertamos me besó y me dijo - que viajecito eh? Y esto recién comienza - y salimos del micro.